El Museo del Encaje de Almagro acoge una exposición única de mantillas y velos de blonda. Hasta el mes de junio, el visitante puede disfrutar de una veintena de piezas únicas y de valor incalculable que datan de los siglos XIX y principios del XX realizadas con hilo de seda.
El alcalde, Luis Maldonado, ha inaugurado esta muestra temporal que se ha podido llevar a cabo gracias a la colaboración desinteresada de familias almagreñas que han cedido estas joyas hechas a mano y que se presentan junto a imágenes, fotografías y pinturas antiguas de la Semana Santa de la localidad cedidas por las Hermandades de San Juan, de la Soledad, y de Jesús Rescatado y por la familia Aparicio Huertas.
Maldonado ha explicado que es la primera vez que se reúnen once mantillas de blonda, la mayoría de más de cien años de antigüedad y en perfectísimas condiciones, lo que habla del “buen hacer de los almagreños a la hora de conservarlas”. Ha invitado también a visitar la muestra porque en sin duda una ocasión única para poder ver “tanta joya” de una sola vez y en el mismo espacio.
La mantilla es un tocado elegante femenino de encaje que comenzó a usarse en las celebraciones religiosas. Prenda distinguida que las mujeres incorporaron a su vestimenta sobre todo durante los siglos XVIII y XIX y que usaban en los actos más importantes de su vida y de la ciudad. Sin duda la Semana Santa era uno de ellos. Almagro conserva aún esta tradición y cientos de mujeres almagreñas salen cada Sábado Santo en la procesión de Nuestra Señora de la Soledad, conocida popularmente como la procesión de las mantillas.
Por eso, el Ayuntamiento de Almagro, a través de la Concejalía de Cultura ha querido, coincidiendo con la Semana Santa, dar a conocer estas admirables piezas en el Museo Municipal del Encaje y la Blonda de Almagro. Hay picados de mantilla, un tira de una mantilla para que la gente conozca cómo se hace una mantilla colocados con todo el mimo y de manera muy elegante en una sinergia con las imágenes antiguas de la Semana Santa de Almagro. Como curiosidad, hay un par de mantillas que no estarán durante el Sábado Santo ya que sus propietarias las lucirán en la procesión.
El Museo, reconocimiento a la labor artesanal
El Museo nació como reconocimiento público a una labor artesanal, arraigada en Almagro y algunos de los municipios del Campo de Calatrava, durante cientos de años. El encaje de bolillos llegó Almagro en el siglo XVI con la llegada a España de los flamencos de los Países Bajos y Carlos I.
El Museo abrió sus puertas, después de diversos intentos y numerosas gestiones en junio de 2004, gracias a las donaciones y cesiones de numerosos almagreños, y al apoyo de instituciones, como el propio Ayuntamiento la Junta de Comunidades de C. La Mancha o la Mancomunidad de Municipios Tierra de Caballeros y Tablas de Daimiel.
El encaje de bolillos y la blonda supone un testimonio excepcional de la supervivencia de artes y oficios populares, constituyendo un exponente de la tradición que permanece prácticamente en sus contextos originales. Por ello, el Ayuntamiento de Almagro ha asumido la responsabilidad de recuperar su memoria histórica, conservarla y difundirla mediante la creación de esta institución.
El Museo Municipal de Encaje y Blonda cuenta con fondos propios, entre los que merece destacarse la donación de una importante colección de picaos, efectuada por los herederos de Toribio Martínez (encajero de la ciudad), compuesta por piezas de diferentes épocas y formas, mostrándonos la riqueza y variedad de formas y usos que, a lo largo del tiempo, ha tenido esta producción artesanal. Además se muestran piezas ya confeccionadas de encaje de bolillos, con variedad de formas y dibujos: lenzado, medio punto, guipur, punto encontrado, bretón, etc., utilizando para ellos motivos geométricos, florales, animales, etc. Los fondos del museo se completan con una muestra de trabajos de encaje realizados con seda natural descruzada, la Blonda, con cuya técnica se realizan pañuelos, velos, abanicos y sobre todo la famosa “Mantilla de Almagro”. Para completar la muestra, otra sección de este museo esta dedicada a los utensilios con los que se elaboran los trabajos: almohadillas, picaos, bolillos, etc.