El proyecto Carta de Futuro para una Ciudad Accesible ha publicado un informe de diagnóstico y conclusiones de esta iniciativa, que recoge el proceso participativo realizado de septiembre a marzo y el conocimiento que se ha ido generando en los diferentes talleres sobre la situación de las personas con diversidad funcional en Ciudad Real, los futuros deseables y no deseables que se han construido y las propuestas para hacer de Ciudad Real una ciudad más accesible en la que mejore la calidad de vida de las personas con diversidad funcional.
El informe incluye una breve aproximación a la situación de las personas con diversidad funcional a través de estadísticas y estudios realizados; así como aportaciones de las asociaciones y colectivos que han participado durante todo el proceso.
El proyecto ha sido promovido y llevado a cabo por la Asociación Ciudad Accesible y diseñado y dinamizado por el Equipo Andecha, Participación y Trabajo Comunitario, además, cuenta con la colaboración del Servicio de Apoyo al Estudiante con Discapacidad (SAED) de la Universidad de Castilla-La Mancha, COCEMFE Ciudad Real, el Patronato Municipal de Personas con Discapacidad del Ayuntamiento, la Diputación de Ciudad Real y financiado por Obra Social la Caixa. Queremos agradecer a todas ellas su apoyo y colaboración, que han sido fundamentales para su ejecución.
Sus promotores esperan que este informe contribuya a conocer un poco mejor «la situación que vivimos las personas con discapacidad en nuestra ciudad y aporte ideas de trabajo hacia la transformación social en pro de la accesibilidad, que sean útiles a entidades, instituciones públicas y sociedad en su conjunto. Con ese deseo se ha elaborado».
En cuanto a las conclusiones, este estudio señala que el conocimiento de la situación de la personas con diversidad funcional en la provincia de Ciudad Real y en su capital no es del todo clara ni se encuentra sistematizada. No existen suficientes estudios, ni datos, especialmente en algunos ámbitos como el educativo o el sanitario, la participación social; etc. Los estudios que se encuentran son en su mayoría cuantitativos, lo que dificulta una mayor comprensión de la problemática. Por ejemplo, se desconoce la situación de la accesibilidad e integración en la que se encuentran los niños/as en las aulas, aunque se conoce su número y tipo de discapacidad.
Las asociaciones y entidades de personas con diversidad funcional y de defensa de sus derechos son una fuente privilegiada de información, sin embargo, a menudo ésta no se encuentra escrita ni sistematizada, por lo que el acceso a la misma es complicado.
Respecto a los problemas y dificultades para las personas con diversidad funcional en Ciudad Real, destaca la «persistencia» de barreras arquitectónicas de transporte y comunicación en todos los ámbitos de la vida, tanto en todos los aspectos urbanísticos, interiores de edificios públicos y privados, así como la ausencia de Intérpretes de Lengua de Signos Española, señalética adecuada, etc.
Otro de los problemas al que el informe hace referencia es la dificultad en el acceso al empleo, «marcada por la escasa sensibilización de los empleadores y la empresa privada, la necesidad de mayor formación para el empleo para las personas con diversidad funcional, la existencia de puestos de trabajo no adaptados y el incumplimiento de la normativa de cuotas». Todo esto, concluye, repercute en el estatus socioeconómico de las personas con discapacidad.
En cuanto al acceso a la educación, el informe resalta la «ausencia» de una educación inclusiva en las aulas generales para las personas con diversidad funcional. Subraya que sería necesario dotarlas de recursos y profesionales para hacerlo posible, máxime cuando la situación ha «empeorado» debido a los «recortes». Además, el estudio hace hincapié en la ausencia de información sobre los recursos educativos para las personas con diversidad funcional y el bajo nivel formativo que alcanzan muchas personas con discapacidad debido a las barreras que encuentran.
En cuanto al acceso a la salud, destaca la ausencia de terapias especificas para cada discapacidad, «excluyéndose por ejemplo tratamientos calve como la rehabilitación y el tratamiento inadecuado y desigual de los enfermos crónicos». A esto se suman los problemas de accesibilidad en los recursos sanitarios, con mención especial a la falta de Intérpretes en Lengua de Signos Española.
En lo que se refiere al acceso a la vivienda, el informe pone de manifiesto la dificultad de acceso a la misma por la ausencia de ayudas, así como la dificultad económica de la mayoría de las personas con diversidad funcional para la adaptación de las mismas, adaptación que como se nombró en uno de los talleres de diagnóstico: “es una necesidad primaria, pero en la realidad, un privilegio”, por la gran carestía para adaptarlas. En cuanto a las leyes y normativas de accesibilidad se destaca su «incumplimiento sistemático».
Asimismo, las personas participantes señalaron la escasa participación política y social de las personas con diversidad funcional, así como las dificultades de acceso a los espacios de ocio y cultura.
Por otro lado, el estudio alude a las dificultades para la autodeterminación y la capacidad para tomar decisiones por sí mismas, aspecto que fue especialmente destacado por las personas con discapacidad psíquica. Señalan aquí aspectos como la carestía de los apoyos técnicos, la falta de independencia por el miedo a su discapacidad, barreras para vivir la sexualidad, el reducido número de intérpretes, etc.
Las llamadas «barreras mentales» es uno de los aspectos que más preocupa a las personas y entidades participantes. Es decir, las formas de trato y consideración social hacia las personas con diversidad funcional, destacándose la falta de empatía, el desconocimiento, la victimización, el trato discriminatorio, etc.
En cuanto a los factores de cambio que más pueden influir en la transformación de esta situación las personas participantes escogieron dos. Por un lado, el cómo sea la evolución de las políticas sociales de reparto de las recursos general, y también en discapacidad, se considera un factor clave. Por otro lado, cómo evolucionen las formas de trato y consideración social hacia las personas con diversidad funcional también puede serlo. «Así pues, se escogieron un factor económico de tinte más materialista y otro factor de carácter social, lo que apunta así mismo a las principales preocupaciones de las personas participantes».
Estos dos factores constituyeron los ejes de los escenarios de futuro planteados por los participantes del proyecto. En el desarrollo de los escenarios, los participantes estimaron que el futuro supondría un empeoramiento de la situación de las personas con discapacidad, por el deterioro de las condiciones de vida, el aumento de la dificultad de acceder al empleo y la vivienda y la privatización de los servicios públicos, debido a la actual situación socioeconómica de crisis y a las políticas de recortes derivadas de la misma. «Esta expectativa de cara al futuro resulta gravemente preocupante y requiere de intervención para evitarla, destacando el papel del tejido asociativo en esta labor». Más positiva era la visión respecto a la posible evolución de las formas de trato y consideración social, si bien los colectivos participantes mostraban su preocupación por la posible competencia social ante la falta de recursos así como la necesidad de la sensibilización y concienciación social como una prioridad.
Respecto a las propuestas para intervenir sobre la situación de las personas con diversidad funcional, han sido muchas, unas cincuenta, y referidas a los diferentes ámbitos. De las que se escogieron ocho para profundizar y desarrollar. «De ellas se deduce que las barreras que continúan encontrando las personas con diversidad funcional son muchas y diversas, y que tanto la sensibilización como la necesidad de invertir más recursos económicos y materiales así como voluntad política en la eliminación de barreras es fundamental, no sólo en cuanto a barreras arquitectónicas, sino en cuanta a la integración educativa, la asistencia sanitaria, el acceso a la comunicación, el empleo; etc.»
En 1990 con motivo de una exposición grabé un video en el que recogía diversas barreras arquitectónicas que veía en esta ciudad. Hoy en 2014, muchas de ellas aún permanecen.
Estimado Luis Mario
¡Qué interesante eso que comentas!! ¿Te importaría compartir las fotos con el proyecto? pueden ser muy útiles
Un abrazo