Daimiel Noticias.- Las butacas del Teatro Ayala presentaban un aspecto prácticamente lleno para asistir en la tarde del viernes a la entrega del Premio Eusebio Ortega Torres que recibía a título póstumo María Paz González Carrato. Un evento que reconocía y galardonaba públicamente su altruismo, compromiso y solidaridad entre los más débiles.
Al acto asistieron el vocal del Consejo de Cooperación y sacerdote de Santa María, Valentín Sánchez Rojas, el director de la Diócesis de Manos Unidas, Pelayo Dorado, así como familiares del misionero Eusebio Ortega Torres y la galardonada María Paz González-Carrato, además de miembros de la corporación municipal entre los que se encontraba el alcalde de la localidad, Leopoldo Sierra.
La gala, que comenzó en forma de homenaje, entre los acordes de cuatro instrumentos de viento, daría paso a las palabras emotivas de María del Carmen Torija, concejala de Cooperación Internacional encargada de presentar el acto. La edil subrayó que este premio viene a reconocer “la labor humanitaria y de entrega y el trabajo callado y comprometido”. Agradeció que personas como la premiada “den lecciones tan importantes de vida”.
Por otro lado, Valentín Sánchez Rojas representante también de Cáritas, recordó la responsabilidad constante que María Paz González-Carrato tuvo en la Casa de Abraham de la localidad “impartiendo habilidades sociales” o las “múltiples tareas” que desarrolló como voluntaria.
De la misma forma, Pelayo Dorado reconoció que tras recabar testimonios de la galardonada a través del grupo local de Manos Unidas e incluso de la delegación de Ciudad Real “todos coincidían en la gratitud de esta persona”.
Asimismo, agradeció a la familia “su generosidad por la entrega de la dotación a Manos Unidas en un proyecto para la construcción de un hospital en Mozambique”.
El homenaje finalizaba con la entrega del Premio Solidaridad 2013 a los familiares de María Paz González Carrato de manos del alcalde, Leopoldo Sierra. Durante su intervención, el primer edil reseñó “la labor incasable en pro de los demás, la solidaridad, la integridad, pero sobre todo la humanidad que derrochó la galardonada”. Aprovechó la ocasión para recordar la labor de los cooperantes misioneros y voluntarios.
