La última reunión de mesa negociadora del ERE extintivo de Solaria, que afectará a la totalidad de la plantilla en Puertollano, no ha servido para mover la posición de la empresa ni un milímetro. La reunión mantenida hoy entre comité y dirección sólo ha servido para certificar que la negociación apenas existe. Según informa el presidente del comité de empresa, Jesús Manchón, Solaria se empeña en despedir a los 213 trabajadores con una indemnización mínima de 20 días por año trabajado que pagaría de forma fraccionada.
«La empresa mantiene su idea de comercializar con módulos fotovoltaicos pero insiste en que no serán fabricados en Puertollano», lamenta Manchón, quien ha anunciado que la Solaria «quiere externalizar los posibles trabajos (mantenimiento, vigilancia, etc.) que pudieran quedar en la empresa una vez finalizado el ERE». Tampoco ha habido novedades en el pago de salarios pendientes. No se ha abonado ni la segunda mitad de enero ni la nómina de febrero.
Por su parte, el comité de empresa ha propuesto mantener la fábrica abierta «con un plan de viabilidad creíble, adjudicando al menos los trabajos que se quieren externalizar a la plantilla actual». Además, no acepta la oferta inicial de 20 días de indemnización.
La próxima reunión de la mesa negociadora se celebrará el miércoles 12 a las 10,00 horas. Según el presidente del comité, «la empresa se ha comprometido a venir con una postura distinta».
Los trabajadores han pedido el apoyo de la ciudadanía a la manifestación convocada para mañana sábado, que partirá del castillete del mercadillo (pozo Santa María) a las 12,00 horas.
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