El Ayuntamiento de Argamasilla de calatrava, con la Cooperativa Virgen del Socorro presentaron en un acto de degustación los vinos del año 2013, obtenidos en la vendimia del pasado año en las viñas de la localidad, así como vinos de 2011 que tras su crianza en este tiempo están listos para su comercialización. Los asistentes a la cata coincidieron en señalar como el esfuerzo por la calidad que realiza la cooperativa tiene reflejo en sus caldos.
En la mañana del domingo, y en el Ayuntamiento de Argamasilla de Calatrava la Cooperativa Virgen del Socorro ofreció a todos los rabaneros y rabaneras vinos Argavin blanco de la variedad de uva Airen en rama (esto es el vino de la cosecha del pasado otoño, recién obtenida y aun sin envasar), que sorprendió a los asistentes por lo insólito de la experiencia: un vino con muy poca graduación alcohólica, fresco y con mucho sabor a fruta.
Además se cató el Argavín tinto crianza de la vendimia de 2011, que tras su paso por las barricas de roble ya está listo para su comercialización, además un joven tinto, que no estaba previsto, y que llamo mucho la atención a quienes lo degustaron por su frescura.
El prestigioso enólogo puertollanense Félix Delgado, que fue el encargado de dirigir la cata destacó que “son vinos sencillos, que no es lo mismo que de poca calidad, sino accesibles, golosos y que se pueden beber en toda ocasión”.
Por su parte Javier Sánchez Fernández, en representación de lo cooperativa hablo de los procesos de elaboración de los vinos en la cooperativa: “hemos hecho un esfuerzo grande en los últimos años en cuanto a la mejora de la calidad: la vendimia en cajas de 10 kilos, en lugar de en los remolques, el control de la fermentación o el paso por la barrica hace que hoy podamos ofrecer unos vinos de calidad alta”.
En representación del ayuntamiento el concejal de Cultura J. Molina Gil se dirigió a los presentes en un encuentro en el que aseguró “damos la bienvenida simbólica al nuevo vino de Argamasilla que se elabora en la cooperativa, en la casa de todos, el ayuntamiento. Levantar una copa de vino de la tierra es un gesto que esconde mucho detrás: es apostar por nuestros productos, por nuestra tradición y por el trabajo de nuestros agricultores; nuestra gente.