La plataforma contra la ampliación de la zona azul de Ciudad Real se enfrenta al reto de reactivar la movilización ciudadana

Eusebio Gª del Castillo Jerez.–  A la asamblea de la plataforma contra la ampliación de la zona azul celebrada anoche apenas acudía una docena de personas, casi todas ellas vinculadas a la Federación Local de Asociaciones de Vecinos Alfonso X El Sabio (FLAVE), al PSOE o a Izquierda Unida. Volver a movilizar a la ciudadanía, desmotivada, según los asistentes, por la dilatación de los plazos por parte del Ayuntamiento a la hora de resolver la solicitud de referéndum, sería el objetivo primordial para la plataforma de cara al futuro.

Según señalaba José Luis Huertas, vocal de la FLAVE, se había acordado celebrar una asamblea en torno a los tres meses del registro de las firmas y la solicitud de referéndum para estudiar las nuevas acciones a llevar a cabo por la plataforma, debatir sobre el convenio firmado por el Ayuntamiento con los comerciantes para la puesta en marcha de la moneda de la zona azul y, «forzosamente», para estudiar un decreto de Alcaldía que fue entregado el 14 de febrero a los ciudadanos que registraron las firmas, «un día antes de que se cumpla el plazo del silencio administrativo». La notificación comunica la suspensión del plazo para resolver la iniciativa ciudadana que proponía la celebración de la consulta popular hasta que sea emitido un informe por parte del interventor municipal. «La administración está obligada a resolver según la ley – explicaba Huertas-, pero cuando es necesario pedir un informe se puede aplazar la resolución hasta que se tenga el informe o hasta un plazo máximo de tres meses».

En cuanto al convenio firmado entre el Consistorio y los comerciantes, el vocal de la FLAVE aseguraba que «se han modificado los contratos, no está claro el dinero que cuestan las monedas, van a dar una subvención que no es subvención, hay dinero que no aparece en el capítulo cuatro de los presupuestos…». Según Huertas es un «auténtico desastre». Aunque puntualizaba que desde la FLAVE están de acuerdo con que se dé una solución a los comerciantes, porque «supone un reconocimiento tácito de la propia alcaldesa de que la zona azul genera un problema que ha tenido que resolver. Lo que no estamos de acuerdo es en la solución que se le ha dado a este problema».

El secretario general del PSOE de Ciudad Real, Emilio Villarino, manifestaba su optimismo porque «si hubiera un informe que categóricamente hubiera determinado que el referéndum no se podía hacer, no nos hubieran tenido que dar largas, y ya lo hubieran dicho». Según el líder de los socialistas, el retraso obedecería al interés del equipo de gobierno por desactivar la movilización ciudadana. «Lo van a alargar todo lo que puedan», añadía.

Por su parte, la portavoz de Izquierda Unida, Carmen Soánez, también hacía una lectura positiva. «Lo que han visto es que las firmas son las necesarias y adecuadas para poder hacer el referéndum según la normativa municipal», decía. Y coincidía con Villarino en considerar que la intención del Ayuntamiento, con este decreto de Alcaldía, sería «desactivar» la movilización ciudadana.

En cuanto a las medidas que la plataforma se plantea adoptar en el futuro, se acordaba informar a la Fiscalía una vez emitido el informe del interventor, acudir a la justicia en el ámbito de protección jurisdiccional de los derechos fundamentales, ya que agilizaría los trámites; solicitar la justicia gratuita, convocar una rueda de prensa con los ciudadanos que registraron las firmas, presentar mociones y preguntas en los próximos plenos, así como elaborar carteles que se expondrían en los establecimientos que colaboraron en la recogida de firmas, para informar de los logros conseguidos con la campaña y agradecer la implicación de los ciudadanos.