La idea de una cicatriz como fruto involuntario de una experiencia vivida. Sonia Carrero rompe la intimidad de la cicatriz en la exposición fotográfica que hasta el 15 de marzo muestra en el Museo Municipal, dentro del proyecto de documentación fotográfica que desarrolla en los últimos dos años y que ha plasmado en un libro.
Sonia Carrero (1988) es licenciada en Bellas Artes por la Facultad “Alonso Cano”, de Granada, posee un amplio currículo vitae y una amplia experiencia en diversas disciplinas como pintura, cerámica, fotografía, etc. Ha participado en Puertollano en actividades artísticas con el colectivo Colectivarte
La concejal de cultura, Ana Muñoz, invitó a los puertollaneros a visitar esta exposición ya que es una forma de apoyar a los jóvenes creadores que se abren camino en el mundo artístico. Las imágenes y textos de esta exposición han sido recogidas en un libro con sesenta instantáneas, de las que se han seleccionado una decena que ahora pueden verse en la planta baja del Museo.
Marcas de nuestra vida
Se hace un recorrido desde el nacimiento, con una cicatriz que todos tenemos en común, el ombligo, pasando por la infancia y otras surgidas en accidentes, intervenciones quirúrgicas, etc. “Las cicatrices son como un recuerdo, se habla de ellas en pasado, de ese proceso de cicatrización”, dice Sonia Carrero.
Titulo Cicatrices captadas en Puertollano y Granada, detrás de las que hay una historia distinta, diversa, un motivo y una causa, que se guarda en lo más hondo de la intimidad.
Titulo Cicatriz, como materialización de un recuerdo, experiencia o como algo íntimo a la vista de todos. Entrar en las vivencias de gran valor íntimo y sentimental. “Fue muy interesante observar las diferencias en el comportamiento de las personas dependiendo del motivo que había producido la cicatriz. La gente no reaccionaba igual si se trataba de un incidente de la infancia o al recordar una operación o un accidente”.
Titulo Para Carrero la belleza de las cicatrices reside en que son una marca externa de las vivencias, que quedan a la vista de cualquiera que desee posar su mirada sobre nuestra piel desprotegida, una piel que deja al desnudo la intimidad de las experiencias.”La cicatriz es un símbolo muy potente no solo por su carácter de “marca” sino porque a la vez es un plano en el que el pasado y el presente confluirán de forma continúa”.
