Georgina Cupido Ruiz.- «Ah, ¿eres española? ¿Y de dónde, Madrid o Barcelona?». Los franceses no saben donde está Ciudad Real. Al sur de Toledo y cerca de Córdoba. Don Quijote les suena. Conocen a Nadal, las playas de Mallorca y las pelis de Almodóvar. Nací hace 20 años en Puertollano y desde septiembre de 2011 vivo en París. Estudio Lenguas Modernas en la Sorbona y la lluvia y la distancia han sido mis mayores enemigas desde ese momento.
La primera vez que subí sola a un avión con dirección a la ciudad de las luces no podría haber imaginado que aún hoy seguiría viviendo aquí. Llevaba mi maleta cargada de ilusión y sueños pero también de miedos.
Miedo al rechazo, a un idioma nuevo,a una gran ciudad llena de desconocidos… También tenía miedo a que todo hubiese cambiado cuando volviera unos meses después.
La realidad era muy distinta. A diferencia de lo que pensamos en España, a nuestros vecinos les encanta nuestro país y aprovechan cada ocasión que tienen para poner en práctica las cuatro palabras que recuerdan de sus vacaciones al otro lado de los Pirineos.
Poco a poco vas conociendo las calles, ves caras que te suenan en el metro y empiezas a conocer a las personas que en unos meses se convertirán en tu apoyo.
Recuerdo que al principio oír a alguien hablando en español me alegraba el día. Pasaba a su lado, en silencio y sonriendo, y le lanzaba una mirada cómplice. Seguro que ni se daban cuenta, pero a mi me trasladaba a casa por un instante.
Viajar siempre te enseña algo. Supongo que el ser humano es curioso por naturaleza. He tenido la oportunidad de conocer a gente de todos los rincones del mundo y lo que tengo claro es que la amistad no entiende de fronteras ni de kilómetros.
Recorrer nuevos caminos implica dejar atrás muchas cosas que te importan. Estar tan lejos de casa puede ser muy duro a veces. Los días y las horas de espera en el aeropuerto pueden hacerse eternos pero cuando llegas y por fin puedes dar ese abrazo que llevas guardando durante tres meses… echar de menos merece la pena.
Además de aprender de la gente que te rodea aprendes a conocerte a ti mismo. Cómo reaccionas ante ciertas situaciones, lo valiente que eres algunas veces o que no es tan malo estar solo de vez en cuando.
La mayoría de los españoles que vivimos en la capital gala tenemos billete de vuelta. Otros vienen buscando la esperanza que la crisis española les ha quitado. Pero al fin y al cabo todos estamos lejos de los nuestros. Tenemos la inevitable tendencia de reunirnos en cuanto surge la ocasión.
Esta ciudad tan fría para algunos, tan gris e imponente, es para mi una mezcla de culturas y contrastes, un lugar lleno de cosas por descubrir.
Siempre hay una exposición que visitar, una obra de teatro que ver o un concierto al que ir, y eso es lo que me gustaría mostraros en este rincón cada semana.
Como decía Ernest Hemingway en una carta a un amigo en 1950: »si tienes la suerte de haber vivido en París cuando joven, luego París te acompañará, vayas donde vayas,todo el resto de tu vida«.
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Como me he reído! Jajaja muy bueno, a mi me paso igual en Estrasburgo. Aunque he de decir que nosotros de geografía francesa somos bastante peores que ellos de la española. Claro que les quitas de la costa mediterránea, Madrid y Barcelona y se pierden. ¿Pero cuantos españoles saben donde está el Franco Condado (Franche-Comté)? Suerte por París paisana, también a la comunidad española. Espero que los que se han ido obligados por la crisis (y sus culpables) algún día puedan regresar, sino pronto haré yo las maletas para cruzar los pirineos. XD
Bienvenida a esta panda de locos, amiga Georgina
Me has emocionado Georgina, mi hija está tambien fuera de Erasmus y me has acercado por un momento un poco más a ella, a sus impresiones a sus ilusiones y miedos. Muchas gracias y suerte en Paris.
Salut les copains!
Francia es un delirio geométrico y simétrico; tiene forma de hexágono, que es la manera más recta de dar de lado a nadie; por algo está en el centro de Europa, porque siempre se han sentido el centro de todo, los muy ellos; hasta el metro de platino está en París, porque los franceses lo miden todo. Los franceses siempre guardan cola, al contrario que los italianos, que se la saltan cuando pueden y aunque no puedan: todo está bien ordenadito y en su lugar en Francia, o atornillado, como la torre Eiffel. Hasta el arte más informal guarda un orden geométrico, como ese cubismo analítico con que nos han roto las gafas. Toda Francia huele a jardí, y es un jardín; hasta su comida tiene algo de jardín cartesiano y bien compuesto, donde es imposible perderse de tantas líneas rectas como hay. Yo, que he estado en Francia y soy caótico, siempre quise estar allí para que me dieran forma, y, como dices, siempre he querido volver. Francia no pertenece a los franceses, la hemos inventado entre todos los europeos, porque tiene un pedazo de casa cosa que es Europa. Bienvenida, chica.
Romera, me quito el sombrero, como siempre.
En cuanto a lo de viajar, cuanto más mejor, cuanto más lejos mejor, cuanto más diferente mejor, cuanto más tiempo mejor.
Hay mucha literatura de viajes, y dentro de ella mucha literatura de viajes iniciáticos que son como un chute de Vicks para la mente.
He tenido y tengo la suerte de viajar por cuestiones laborales por todo el mundo y no hay cosa que te ponga más en tu sitio que ir a lugares diferentes. Te «desenrancia», evita que seas un chovinista, que entiendas el por qué real de las cosas y no el que te dicen los reportajes de la tele.
Esa experiencia, aunque en muchos casos tenga su origen en la crisis, es parte de una mochila que no pesa nada y que te hace ciudadano del mundo y no de un cortijillo.
Aprovecho para decir que, si escribo a deshoras en ocasiones, no es como dice algún troll, que si no duermo para escribir. A más de 10.000 kilómetros de aquí MCR se lee a las horas de allí, pero eso el que no viaja no lo piensa (el chovinista no entiende de jet lag).
Disfruta y, aunque haga frío, estás en la ciudad de todos los grandes, sea la disciplina que sea. Come, bebe, pasea, empápate de sus museos, vive la noche y «que te quiten lo bailao».
me has enamorado !!!
mi último viaje ha sido recientemente por EEUU durante 6 meses y ha sido una auténtico viaje de sensaciones y reciclaje personal, he tenido oportunidad de viajar por maravillosos lugares del mundo y comparto tu opinión.
Pero he de decir que este último viaje me ha fascinado, sobre todo conocer la época hippie de los 60 en la Costa Oeste que jamás me llamo la atención, pero nunca se sabe en la VIDA 🙂
Muchas gracias a todos por llenarme de ilusión el primer día,por los ánimos y por leerme.Estoy encantada de formar parte de este equipo y espero que disfrutéis de los trocitos de París que iré dejando por aquí.
Bonne nuit et à très bientôt!
Ole mi niña!! Me alegro mucho de que tengas esta oportunidad de escribir, y de escribir sobre nuestra París. Todo muy cierto y tan nuestro.
Mi opinión ya la sabes pero que empezarla con una pregunta y acabarla con una citación me parece perfecto, cada párrafo para una cosa, sencilla y directa.
Sabes que la primera lectora aquí cada vez que escribas seré yo jajaja. Bonne nuit ma belle
Hola,
Gran texto, mucho feeling y mucha emoción, que surge al rascar de estas palabras sobre la piel de los años. Los que hemos vivido una buena temporada en otros países te comprendemos perfectamente…los que apenas hemos pisado París..queremos más!!!. Un Saludo y mucho ánimo..
Firmas como éstas representan un chorro de aire fresco. París es tan extenso como el alma humana. Bienvenida.