Daimiel Noticias.- Entradas agotadas desde hacía semanas, calidad de la materia prima más que constatada y fechas perfectas para disfrutar de un espectáculo en familia. Los factores que giraban en torno al estreno del musical de “El Rey León” no daban lugar a dudas, aún así, nadie o casi nadie de los allí presentes sabía exactamente al espectáculo de primer nivel que se iba a enfrentar en la noche del viernes.
“El Rey León” era llevado a las tablas del Teatro Ayala gracias a una cuidada y profesional adaptación realizada por la joven asociación Musical “Rompehielos”, que ha tenido en ascuas a sus seguidores daimieleños durante los últimos meses y que ha agotado todas las entradas de sus tres citas navideñas (las próximas dos están fijadas para este mismo sábado y el domingo). Desde el primer minuto, con la presentación de “El ciclo vital”, con un destacable y genial trabajo de la actriz que interpretaba a Rafiki, y el despliegue de actores, colaboradores, vestuario y maquillaje, el público pudo constatar que eso iba enserio.
El ritmo, el nivel y la capacidad de sorprender al público (con apariciones repentinas de personajes entre las butacas, encendido de bengalas, chistes y chascarrillos incluso en los momentos más emotivos) no bajó ni un momento durante el resto de la obra. El musical conserva la esencia del original que se estrenaba en Broadway en 1997 y que era adaptado al castellano por primera vez en 2011 para ser representado en el Teatro Lope de Vega de Madrid, donde sigue en la actualidad. Los elementos más destacables son esos cuidados trajes de animales que visten los actores así como las gigantes marionetas que representan a algunos de los personajes, como es el caso de los divertidos Timón y Pumbaa.
Todas estas piezas se integran también como fragmentos principales de este cuidado Rey León a la daimieleña que cuenta con una singularidad en relación al original, ya que no cuenta con música en directo. Rompehielos ha optado por tomar la banda sonora original que James May diseñó para el musical, compuesta por canciones extraídas directamente de la película pero también por otras piezas creadas exclusivamente para el musical por músicos como Elton John o Tim Rice, y trabajar con ella. Una elección que en ningún momento desluce la obra ni tampoco el gran trabajo y esfuerzo que hay detrás de un auténtico desafío que pretende (y consigue con creces) llevar el musical más ambicioso realizado jamás en nuestro país a una localidad de 18.000 habitantes.
Junto a la actuación de la ya mencionada Rafiki, cabe destacar también la de los actores que interpretan a Scar, Mufasa, el divertido Zazu o Simba y Nala; estos dos últimos tanto en la versión de niños que protagonizan la primera parte del musical y que fueron elegidos de un productivo y participativo casting realizado por Rompehielos para la ocasión, pero también en la versión de mayores, que se extiende durante la segunda parte del musical. En lo que a momentos musicales memorables se refiere, fueron especialmente aplaudidos durante las dos horas de espectáculo temas como “Hakuna Matata”, “Están en ti”, “Él vive en ti” o “Yo voy a ser el Rey León”. Otros factores como decorado, montaje o puesta en escena también supieron estar a la altura de una obra que, todo apunta, volverá a repetirse en un futuro no muy lejano.
