Daimiel Noticias.- El salón de plenos del Ayuntamiento de Daimiel acogió este domingo el acto institucional de homenaje al pintor Ángel González de la Aleja, fallecido en mayo del pasado año. El lugar elegido no era causal ya que en una de sus paredes luce el mural que González de la Aleja pintó en 1999 con las señas de identidad más representativas de su obra, tal y como reflejó en la conferencia del acto, Jesús Sánchez-Mantero, licenciado en Historia del Arte y comisario de la programación que se va a desarrollar durante el próximo mes y medio.
Conferencia a la que le siguió el descubrimiento de una placa conmemorativa al lado de este mural. De ello se encargó su viuda, Ramoni, que, visiblemente emocionada por todo lo vivido en el acto, agradeció en nombre de toda su familia el cariño que Daimiel le sigue teniendo al artista.
Una admiración que el alcalde, Leopoldo Sierra, asentó en la calidad humana de González de la Aleja, quién pese a marchar muy joven a Albacete “siempre tuvo a su pueblo muy presente y no dudó en plasmarlo en su obra”. Por ello Sierra recalcó que era obligado “reconocer, difundir y poner en valor su gran legado artístico”.
Así lo hizo en su concisa y didáctica ponencia Sánchez Mantero, quién definía a González de la Aleja como “un gran pintor, retratista y muralista pero sobre todo el creador de un estilo muy personal y figurativo”. Apoyado en las imágenes de las obras más destacadas del pintor daimieleño dio a conocer los entresijos de su arte, la sutileza, el significado y el carácter que González de la Aleja dejaba impregnado en cada una de sus obras. “Un pintor muy simbólico que no copia las fotografías sino que las interpreta”, “un artista creador, muy personal y figurativo” y “un autor de obras llenas de sutileza y significado”, fueron algunos los calificativos con los que Sánchez Mantero definió al artista. Trazos que los daimieleños han tenido muy presentes gracias a los murales que decoraban el bar ‘España’ o el salón de bodas de ‘Los Pinos.
La realidad y los sueños, el tiempo, los bodegones, la naturaleza y la mujer juegan un papel fundamental en una obra cuya mejor esencia se podrá disfrutar hasta el 31 de enero en la Casa de Cultura. Una exposición retrospectiva con más de 40 cuadros que se inauguró nada más concluir el acto del Salón de Plenos y que ha sido montada bajo las directrices de la viuda del artista. Precisamente, ella ejerció de guía de la muestra para el alcalde, concejales y primeros curiosos que la visitaron.
