La otoñal locutora de TeleMigas (TVM), una televisión local, anunciaba hace días con una sonrisa-mueca que con la llegada del otoño comenzaba la nueva temporada cultural de la ciudad. Como si en verano no hubiera nada que ver. Durante tres meses, el espacio expositivo de Alumbre tuvo la muestra fotográfica Indias (Mujeres de la India), una visión documental del sector de la población más vulnerable de ese país. TVM, igual que la mayoría de los medios de comunicación más cercanos guardaron silencio. Las mujeres casi quedaron sin voz.
El maestro del periodismo Ryszard Kapuscinski recalcaba a sus alumnos: «La pobreza no llora, la pobreza no tiene voz. La pobreza sufre, pero sufre en silencio…Esta gente no se revelará nunca. Así que necesita que alguien hable por ellos. Esta es una de las obligaciones morales que tenemos cuando escribimos sobre esta parte infeliz de la familia humana. Porque todos ellos son nuestros hermanos y hermanas pobres. Que no tienen voz».
En agosto, una compañera fotoperiodista de Bombay fue violada brutalmente por varios hombres cuando ejercía su trabajo. India y mujer. Ni una linea, ni una frase en nuestros medios. La verdad es que no es destacable, en India cada veinte minutos se denuncia una violación. Además, ¿A quien se le ocurre ser violada en agosto?
Sabemos de sobra que el verano es un período de gran intensidad informativa. No da el tiempo para cubrirlo todo, hay que seleccionar entre tantas fiestas, olas de calor, gigantescas comidas populares, tormentas inesperadas. Muchas exposiciones (sobre todo de fotografía). Los trabajos de investigación te amarran a las redacciones y la formación de los niños para que sean los Wallraff del siglo XXI dejan a cualquiera sin aliento. Los becarios estivales ya no se dejan explotar y no quieren ser, como tantos otros, la caja de resonancia del poder para que, más pronto que tarde, les den una patada en el culo.
Censura, dijeron los mal pensados, para evitar comparaciones con los que tienen medios, dinero, trabajo y poder. Solo existe lo nuestro.
Alberto Rojas, periodista de Puertollano, trabajador del diario El Mundo y comprometido con su profesión, nos muestra estos días en Alumbre la cara amarga de Africa. Imágenes impactantes de ciudadanos condenados a la pobreza por culpa de la avaricia del blanco. Posiblemente algunos también intenten enmudecerlos.
AlumbreSite es un espacio libre dedicado a promocionar la fotografía documental , los trabajos de nuestros fotógrafos y de todos aquellos que cuenten historias con sus fotos. En nueve meses de vida se han realizado siete exposiciones. El pequeño gran local es el único de la región que, sin subvenciones, organiza muestras fotográficas de una manera permanente.
Cuando la mueca de TVM terminó su propaganda apareció otra: «En el campo también tenemos rascacielos», bostezaba una voz anunciando una campaña de caza. ¡¡¡¡¡¡??????¡¡¡¡¡¡¡
Agradecemos a todos aquellos medios de comunicación que difunden actividades como las nuestras, que saben que sus lectores, oyentes y espectadores son personas muy justas que reconocen enseguida la calidad de su trabajo. Que se salen y se diferencia de los que, rindiendo pleitesía , siguen siendo la correa de transmisión de algo que huele a rancio.
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ALUMBRE Colectivo Fotográfico
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