Daimiel Noticias.- La maduración de la uva todavía no se ha completado. Solo si cayese mucho agua esta semana, se podrían alterar estos planes, según ha comentado el concejal de Agricultura, Gregorio Díaz del Campo.
A expensas de las lluvias y tormentas de las próximas 48 horas, el concejal de Agricultura, Gregorio Díaz del Campo, confirmaba que el inicio de la vendimia en el termino municipal daimieleño no llegará hasta pasadas las fiestas patronales. De hecho, algunas bodegas locales «no abrirán hasta el 6 de septiembre» porque tanto las tintas como las blancas no han completado su ciclo de maduración.
Unas previsiones que podrían cambiar, acelerando los plazos, si cayera mucha agua esta semana. Y es que aunque «la viña en general se ha desarrollado bien, en algunas parcelas ha aparecido oidio» y la humedad que se acumulase ayudaría a su propagación.
Si todos estos factores no entran en acción, el concejal de Agricultura indicaba que, pese a las expectativas de la primavera donde se veía «mucha muestra» (racimos aun sin cuajar), la producción será mayor que en 2012, pero en un porcentaje de «entre un 6 y un 10 por ciento». «Tendremos algo más, pero no de forma exagerada y con la consiguiente menos graduación», añadía. No obstante, Díaz del Campo entendía que el precio final para el viticultor se verá favorecido por la venta de todo el vino de la campaña anterior.
Donde no hay motivos para la alegría es en la campaña del melón, que también ha llegado más tarde y que ha dejado unos precios para el agricultor «por debajo de sus costes de producción». Según el concejal ahora mismo «se está pagando a 8 ó 10 céntimos el kilo y solo a partir de 17 céntimos habría rentabilidad». Un problema que se repite periódicamente y que, a juicio de Díaz del Campo, solo se solucionaría fijando unos precios mínimos para los productos hortofrutícolas.