Estanislao Z. Navas.- Resuenan aún en mi cabeza los ecos de cuando la feria tenía sus casetas en el Parque de Gasset y se escuchaba aquello del “pan, jamón, chorizo y vino” en las rifas donde se hacían alarde de los productos de la tierra, teniendo enfrente de las mismas los puestos de berenjenas de Almagro, por citar algunos ejemplos.
Como queda reflejado en el párrafo anterior, la vinculación de las ferias y fiestas con el mundo agrario era manifiesta mas no quedaba ahí la cosa, pues su origen precisamente se halla en el mundo ganadero ya que son una derivación de lo que antiguamente constituían las “ferias de ganado”.
Así cabe decir, en el ámbito de la cultura popular, que – tal como señalan Prado Ramírez Rodrigo y Julián Plaza Sánchez – “durante el verano proliferan un gran número de fiestas patronales que se centran en el mes de agosto, principalmente. Estas tienen caracteres comunes y su organización suele estar a cargo del Ayuntamiento por una parte y por otra de la Cofradía de la Virgen o Cristo. No se pueden olvidar las corridas de toros, los encierros de vaquillas o algún ritual característicos que tiene como protagonista este animal”.
Aunque de forma más recientemente la FERIA sería trasladada a su ubicación actual – el Recinto Ferial -, desde la época en que José Cruz Prado o comúnmente conocido como “Pepe Cruz” fue alcalde de Ciudad Real, el Parque de Gasset había recibido un gran impulso y durante su primer mandato – 1916 – acogería la celebración de la feria que hasta ese momento se llevaba a cabo en la Plaza Mayor y el Pilar. Poco a poco va penetrando en el Parque la verbena de la Feria, tanto en el Paseo Central como en la Fuente Talaverana, donde en los años 60 se construye un auditórium y se derriba el kiosco de la música, del que se dice que es “antiestético”, como leemos en un artículo de Ramón González Díaz en el Boletín de Información Municipal de diciembre de 1968.
La ubicación primigenia de la feria – entre la Plaza Mayor, la de El Pilar y el solar que hoy ocupa la Plaza de Cervantes – aún inexistente – eran instalados los barracones de la feria en honor de la Virgen del Prado, hasta que se trasladó al nuevo Parque Gasset – también queda puesta de manifiesto en las siguientes líneas de don José Golderos:
“El cruce de las calles de Toledo – María Cristina Calatrava – Feria – lugar muy angosto -, llamado «las Cuatro Esquinas», era el «mentidero» de la capital. La «Guía de Ciudad Real», que publicó la imprenta Rubisco en 1869, decía: «Tiene lugar la feria en los ocho días que median del 15 de agosto al 22 del mismo mes. Durante ellos la plaza de la Constitución y las calles de la Feria y Mercado Nuevo son los puntos de más reunión, y especialmente el día 15 por tener lugar la procesión de la Virgen del Prado, y el 16 y 17 en los cuales suele haber corridas de toros».”
A causa del crecimiento de la actividad ferial, el Parque de Gasset dejó pasó al Recinto Ferial como nueva y actual ubicación.
De este modo, con esta pequeña remembranza histórica – a la que a buen seguro podréis añadir multitud de anécdotas – no vengo nada más que a indicar la tradicional algarabía que se desprenden de estos días de goce y / o fervor según cada uno de los ciudadanos guste. 
Así pues, tras la reciente celebración de la popular Pandorga, las fiestas patronales sirven para evadirse de las situaciones que la estación estival no ha podido solucionar – el consabido “paro” se encuentra en la mente de muchos – y una vez bajada la Patrona en las vísperas de San Lorenzo el pasado día 9 de agosto y estando expuesta al culto en su paso procesional hasta el día de la Octava nos adentramos en esta semana que homenajea a la Virgen de Prado, que tiene por prólogo el desfile de Gigantes y Cabezudos el 14 de agosto, y en la cual se muestran diversas actividades tales como:
- Las actuaciones musicales en el Auditorio Municipal de La Granja a cargo de Francisco, Ecos del Rocío, Sergio Romero, el espectáculo infantil Los Gabytos, Juan Magán, Melendi, Fangoria, Radio Olé y la feria de la cerveza.
- Los eventos deportivos como el Campeonato de España de Ajedrez, los torneos de fútbol, el clásico Concurso Hípico Nacional de Saltos.
- Los títeres y guiñoles para los niños en las plazas del Pilar y de Cervantes
- Otras actividades a destacar son: la gran fiesta infantil de ferias, el Gran Prix y los festejos taurinos. La concentración ecuestre y el espectáculo ecuestre en la Plaza de Toros, el concurso de IPSC – aircroft para jóvenes en el Espacio Joven, el Baile del Vermú en la Plaza Mayor, el acto institucional de nombramiento de Ciudadano Ejemplar, y los actos religiosos inherentes a estas fiestas: la Caravana Blanca, la ofrenda de enfermos a la Patrona Ntra. Sra. Del Prado y las funciones religiosas y procesiones los días 15 y 22 de agosto.
- Y, finalmente, en el Recinto Ferial, un año más se acogerán las típicas atracciones y puestos de feria, y las casetas de copas en la pista municipal.
Aprovechando el parón festero, estaré unas semanas de asueto para incorporarme en el mes de septiembre.
¡¡Os deseo a todos que disfrutéis de la feria y del aún caluroso verano!!
A disfrutar de otros lugares y actividades, que con estos escritos creo que tu también disfrutas como lo hacemos nosotros.
A lo largo del día escribirá unas notas que tengo almacenadas en mi memoria. Ahora a vuela pluma decir que el día 16 se celebraba el día de la Provincia con un desfile de Carrozas desde El Pilar hasta la ronda subiendo por Alarcos y bajando por Rey Santo. Un hervidero de personas…y por la noche la cena de gala en la Talaverana. Las corridas, de toros por supuesto, se celebraban durante esos años los días 17 y 18. Ya sigo más tarde….saludos, sofocantes…ah1 se me olvidaba en el desfile de carrozas un años participaron una majorettes francesa…no te digo ná…el revuelo entre el personal quinceañero de esa época, servidor incluido,las patorras al aire y al cielo…
Gracias Fermín por tu seguimiento y a todos y cada uno de los que habéis echo posible que esta sección siga viva en su primer verano. A las puertas del otoño volveremos a vernos y próximamente con algunas novedades… Dicho queda
Aaaaaaaamén.
Leo en El Crisol que ayer el Ayuntamiento hizo una quema «controlada» de pastizal en la zona de San Martín de Porres y, lo que no leo es que se hubiera avisado con antelación a los bomberos y las autoridades pertinentes.
En fin, que con 38 grados, viento y una humedad propia del desierto, ayer se montó un incendio del copón al que tuvieron que acudir, según cuentan, los bomberos a las 15 horas, a las 18 y a las tres de la mañana.
La razón parece ser que era evitar incendios el día de la minitraca esa que hacen después de la feria.
Y yo me pregunto ¿Las quemas de rastrojos no están absolutamente prohibidas para todos en verano? No era normal que hubiera un dispositivo de prevención de incendios preparado?
En fin, no sé, me asaltan las dudas. Y las chuscas…
Querido blister. Tu comentario me parece muy acertado y crítico y viene bien para concienciar a la ciudadanía del mal o buen uso que se debe hacer de la quema de rastrojos en verano debiendo tomar las medidas pertinentes, pero, salvo por el concepto que aparece de feria ¿qué relación guarda con el artículo?
De nuevo te agradezco el comentario pero creo que existen otras secciones que se ocupan de estos extremos y no la relativa al patrimonio como es «recuperando lo pasado».
Sólo es una puntualización, mas no está de más recalcarlo dadas las altas temperaturas existentes en estas fechas y los festejos que habitualmente se encuentran coronados por actividades pirotécnicas.
Gracias de nuevo