Con una fiesta fin de curso y con la práctica de algunos de los deportes que han llevado a cabo a lo largo de la actividad, el Ayuntamiento de Campo de Criptana clausuraba un año más las Escuelas de Verano que han venido desarrollándose desde principios del mes de julio.
Más de 300 niños con edades comprendidas entre los 5 y los 12 años han participado de esta iniciativa que en esta edición se ha dividido en dos grupos con el objetivo de dar cabida a un mayor número de personas.
El concejal de Educación y Deportes, Jorge González, valoraba muy positivamente el desarrollo de las mismas en tanto que “los participantes han combinado el deporte, con el ocio y la formación y educación en diversas ramas”. De ahí que González avanzara que “de cara al curso que viene, el consistorio se está planteando la posibilidad de aumentar las plazas existentes”.
Seis monitores titulados más otros seis jóvenes que están realizando las prácticas de monitores de actividades juveniles se han puesto al frente de estas Escuelas, y precisamente eran ellos los encargados de entregar los diplomas a los niños que han formado parte de sus diferentes grupos.