El diputado regional por el PSOE Santiago Moreno, ha criticado el balance que está haciendo el Consejero de Educación, Marcial Marín, de la política educativa del gobierno de Cospedal. Refiriéndose a la frase utilizada por el consejero “hemos salvado la educación”, Moreno dijo que la educación en Castilla La Mancha «nunca estuvo en peligro y lo que debe considerar son los hechos».
Así, recordó que «el presupuesto de educación que heredaron era de dos mil millones de euros y el que han dejado este año es de mil quinientos, lo que supone una bajada de un 28%». «Esto es, menos profesores, más alumnos por aula, cierre de colegios, cierre de líneas completas para el curso que viene y eliminación de elementos igualadores como la gratuidad del comedor, el transporte o las becas. Buena forma de salvar la educación, esto, lo que está haciendo, es dejar a muchos alumnos fuera del sistema educativo”, dice.
El diputado socialista quiso centrarse en la Universidad y en las becas. «El presupuesto destinado a la universidad de Castilla la Mancha por el gobierno regional se ha reducido a la mitad con el PP. El presupuesto para investigación, clave en una universidad y en la sociedad para ser competitivos a través del conocimiento, ha bajado de los cincuenta y dos a los ocho millones de euros en este año», asegura.
En lo que se refiere a las becas, dijo que «se han eliminado las ayudas para quienes menos recursos tienen, que atendían tanto tasas como transporte, además de Erasmus y de doctorado». “Han pasado de un sistema que garantizaba una auténtica igualdad de oportunidades a incrementar de forma considerable las tasas, lo que ha traído que muchos alumnos no van a poder acceder a la universidad en este momento de crisis económica o bien van a tener que abandonar sus estudios a la mitad”, sostiene. «De hecho, en la región hoy tenemos 377 alumnos que no pueden hacer frente al segundo pago de las tasas».
Frente a esto, el PP hace una política «totalmente errática», a juicio de Santiago Moreno, «pues en un primer momento dijeron que iban a hacer un fondo, después que aplazamientos, ahora el Sr. Marín habla de un fondo solidario». Por eso, se dirigía a Cospedal y Marín diciéndoles que “los derechos no se resuelven con beneficencia, no hay que hacer un fondo solidario. Los derechos como es el de acceder a una educación de calidad, poder completar los estudios, la formación personal, el derecho constitucional que tenemos reconocido todos los españoles, se atiende con recursos desde las administraciones públicas”.