El consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín, ha afirmado hoy “Castilla-La Mancha es una comunidad valiente, sin complejos, con un Gobierno que defiende la libertad de los ciudadanos de acudir o no a los festejos taurinos”.
Durante la inauguración de la exposición ‘Entre el miedo y algodones’, que ha tenido lugar en la madrileña Plaza de las Ventas, el consejero ha recordado que el Gobierno de la presidenta Cospedal “siguiendo el mandado de los propios ciudadanos” declaró la Fiesta de los Toros Bien de Interés Cultural; la máxima protección que otorga la recientemente aprobada Ley de Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha.
En este sentido, Marín ha explicado que “el Gobierno regional quiso dar las máximas garantías y la máxima protección a la tauromaquia siguiendo el mandato de la sociedad, ya que el 89 por ciento de los castellano-manchegos está de acuerdo con que la fiesta de los toros forme parte de la cultura española”, ha manifestado Marín.
Prueba de ello, ha subrayado Marín es que la Fiesta de los toros “forma parte de nuestra cultura y de nuestro patrimonio” y además, representa una “fuente generadora de riqueza y de creación de empleo” ya que los beneficios generados en torno al mundo de la tauromaquia rondan los 300 millones de euros en nuestra tierra.
‘Entre el miedo y algodones’
Por último, Marcial Marín ha felicitado personalmente a la comisaria de la exposición ‘Entre el miedo y algodones’, Sonia González, hija del matador de toros Dámaso González.
Para el consejero, una muestra de la “grandeza” de la exposición reside en que las piezas han sido elegidas por los hijos de los diestros por el valor sentimental que representan para sus padres.
Un buen gobierno debe defender tanto a los que libremente acuden a las corridas de toros como a los que defienden que éstos espectáculos no deberían existir en el siglo XXI.
Pero eso sólo lo sabría hacer un buen gobierno…. pena de éste que sólo sabe mirar atrás.
¿Tendrán también en mente embaldosar el albero de los cosos?… imagino que así si llueve el «carnicero de postín» no se resbalaría al dar muerte…por ejemplo.
Yo creo que la Sra. Alcaldesa de Ciudad REal, tiene en mente embaldosar la plaza de toros para el concierto de Julio Iglesias (para todos los públicos con una entrada de 50€ la más barata) que se celebrará el próximo 20 de julio en Ciudad Real… ESO sí, SIN COSTE… ja ja ja!
Toros y Julio Iglesias. En fin, no me quiero imaginar la tableta de naftalina que tiene este ayuntamiento por cerebro.
Mi más absoluto respeto a los que les gustan los toros y a los que no. A mi me aburren soberanamente. Y con Julio Iglesias, ufffffff.
En cualquier caso, la fiesta de los toros está absolutamente politizada y cubierta de mierda por la derechona que ha querido convertirla en un baluarte de su guerra por conservar lo más rancio del postfranquismo.
Si no hicieran ruido, disfrutaran y nada más, no habría que andar con tanta gilipoyez. Y lo mismo digo para los antitaurinos. Cuando se mea fuera del tiesto….
Los toros son una fiesta en decadencia a la que no hay que matar. Se irá muriendo sola. Aunque ahora se le ha dado oxígeno desde las posturas conservadoras. Si la gente la aparca, como se estaba haciendo, caerá por su propio peso. El problema es ponerle los focos encima.
No hay que tener prisa.