Un plan de empleo para dar trabajo a 32.000 parados con un acuerdo que se puede firmar antes del 15 de junio, empezar “desde ya, desde mañana mismo, a negociar los Presupuestos de 2014”, presentar alegaciones conjuntas como región a los planes de cuenca de los ríos, sobre todo los del Tajo y el Júcar, y crear una mesa de partidos, en la que tendrían cabida IU y UPyD, para abordar la conveniencia, o no, de reformar el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha y tocar la ley electoral. Esos con “los cuatro grandes compromisos, los cuatro grandes acuerdos que, con papeles, por escrito, y con propuestas concretas”, va a ofrecer el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en la reunión que esta tarde va a mantener con la presidenta de la Junta en el Palacio de Fuensalida.
Así lo anticipaba el propio García-Page, esta mañana, en Toledo, en una comparecencia ante los medios de comunicación, en la que comenzaba describiendo la situación en la que, a su juicio, se encuentra la comunidad autónoma a mitad de legislatura, justo dos años después de que Cospedal llegara al Gobierno.
Decía Page que, “dos años después, es como para estar muy preocupados, porque la región está empeorando muy encima de la media de España en todo los indicadores socio-económicos. Aquello que hace dos años iba mal, con Cospedal va peor, porque tenemos 100.000 parados más y el PIB cayendo al 3 por ciento, el doble que la media, y aquello de lo que podíamos presumir, como la Sanidad o la Educación, lo están desmantelando”.
El líder de los socialistas castellano-manchegos ha señalado las cuatro grandes parcelas es la que considera urgente y necesario poder encontrar espacios de consenso con el Gobierno regional.
200 millones para empleo, listas de espera sanitarias y educación
El primero, el empleo. “Tenemos 311.000 parados, 90.000 familias con todos sus miembros en paro y 131.000 desempleados que ya no perciben ni un euro de prestación o subsidio”, recordaba, e insistía en su propuesta, recogida en el decálogo que el propio Page presentó el pasado 2 de Mayo, de aprovechar el mayor margen de déficit que va a tener la región este año, para dedicar esos casi 200 millones de euros adicionales “a crear 32.000 puestos de trabajo y para acometer con urgencia un plan de choque contra las listas de espera sanitarias y el desmantelamiento de la educación pública”.
Ese incremento del objetivo de déficit llevaba a García-Page a ofrecer a Cospedal “hacer piña, ir de la mano a Madrid con una posición única, autonómica, de la región, para conseguir más plazo, pero no porque haya que tranquilizar a los nacionalistas catalanes, sino por criterios sociales, porque no todas las autonomías somos iguales, ni todas estamos igual”.
Se manifestaba el líder socialista abierto a negociar los Presupuestos de la Junta para el año 2014, “desde ya, desde mañana, con una reunión si quiere Cospedal entre el portavoz del PSOE en las Cortes de Castilla-La Mancha y el consejero de Hacienda”.
Pero formulaba dos advertencias:”Hablar de los Presupuestos significa hacerlo antes de que los aprueben y los presenten, no como hicieron el año pasado, y tenemos nuestras líneas rojas. No vamos a avalar un modelo que implique que la sanidad pública empiece a ser un negocio o desmantelar la Educación”.
El agua, el Estatuto y el pucherazo electoral
Por último, García-Page avanzaba que trasladaría esta tarde a Cospedal otros dos posibles grandes acuerdos, sobre los planes de cuenca de los ríos, fundamentalmente el Tajo y el Júcar, y sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha.
En relación a este último asunto, anticipaba la oferta de crear una Mesa de partidos, en la que se incluiría a IU y UPyD, para “abordar con consenso la reforma del Estatuto”. Advertía que, hasta ahora, en el Congreso de los Diputados “no se ha tramitado nunca ninguna reforma de ningún estatuto de autonomía aprobado por un solo partido”.
Y volvía a criticar “el pucherazo electoral evidente que quiere dar Cospedal. Porque, si no, ¿cómo se justifica que quien hace menos de un año cambió la Ley electoral y dijo que la mejor ley de España y la más austera pasaba por aumentar en cuatro el número de diputados, luego dejó sin sueldo a los diputados y ahora los quiere reducir a la mitad? Porque a Cospedal no le salen ni las cuentas, ni las encuestas”.
Page reiteraba que Castilla-La Mancha debería presentar alegaciones “serias y contundentes”, a los Planes de Cuenca de los ríos, sobre todo a los del Tajo y el Júcar, “porque en ambos casos, y sobre todo en el del Tajo y el trasvase, el acuerdo al que han llegado Cospedal y los presidentes de Murcia y Valencia es el de traicionar sus compromisos para tapar el problema”.
Y remataba su intervención asegurando que es un síntoma más del “abandono del Gobierno de una estrategia regional”. En su opinión, “Cospedal lleva dos años anteponiendo los intereses del PP a los de Castilla-La Mancha. Solo así se entiende que acepte sin protestar el plan de cuenca del Tajo, el basurero nuclear en Cuenca o la supresión de las líneas de tren”.