El Grupo Socialista en el Senado está estudiando emprender las acciones legales oportunas contra Castilla-La Mancha Televisión después de que personal del grupo parlamentario comprobara que durante la sesión de ayer, día 22, en la Cámara Alta, «un equipo de CMT utilizó, sin ningún tipo de permiso ni autorización, el despacho personal que Emiliano García-Page tiene allí como senador autonómico designado por las Cortes de Castilla-La Mancha», relata el partido en una nota.
Al mismo tiempo, la dirección del Grupo socialista va a registrar una queja formal ante la Mesa del Senado para que se pueda aclarar esta manera de proceder del equipo de la televisión autonómica regional en Madrid y de la redactora encargada de elaborar el reportaje.
En las acciones jurídicas que se están estudiando podría incorporarse también «la burda manipulación de la que el personal del grupo socialista en el Senado fue testigo».
«En este sentido, varias personas pudieron observar cómo el único objetivo de la información era crear la ficción de unas supuestas ausencias de García-Page en la Cámara Alta. Para ello, incluso hicieron que la senadora del PP, Carmen Riolobos repitiera a cámara unas declaraciones en las que enumeraba las veces que, según ella, García-Page había dejado de votar porque justo en ese mismo instante el propio García-Page pasaba por detrás y entraba en el plano», relata el PSOE.
Según el PSOE, «Emiliano García-Page no solo cumplió ayer con sus obligaciones de senador. Solo se ausentó de un punto del orden del día, en el que se debían votar 300 enmiendas, porque debía acudir, como alcalde de Toledo, al acto oficial del pregón del Corpus en la capital regional. Un acto en el que, por cierto, se comentó mucho la ausencia de representantes de la Junta de Comunidades, de la Diputación de Toledo y de parlamentarios nacionales del PP de Toledo».
«No es sólo esto», señala el PSOE, «es que, tratándose de una información en la que se cuestiona de manera directa a una persona, en esta caso, al líder del PSOE de Castilla-La Mancha, CMT ha vuelto una vez más a saltarse todos los códigos éticos y deontológicos del periodismo al no solicitar la versión ni de García-Page, ni del Grupo socialista en el Senado, ni de nadie del PSOE de Castilla-La Mancha».
El PSOE «lamenta profundamente que la señora Cospedal y el señor Villa, con la connivencia de la siempre dispuesta señora Riolobos, estén tan nerviosos que no duden en forzar a diario a los periodistas de CMT para practicar un auténtico escrache informativo y político a García-Page».