Desde hoy mismo ya pueden comenzar a cultivar los primeros hortelanos a los que el Ayuntamiento de Valdepeñas ha cedido las primeras diez parcelas de los Huertos Urbanos Ecológicos, una iniciativa del Consistorio destinada exclusivamente al autoconsumo para promover una alimentación sana y cambios de vida más saludables de los que ya se han beneficiado ocho personas desempleadas, un jubilado y una asociación.
En el acto de entrega de llaves la Concejala de Medio Ambiente, Amparo Crespo, señaló que se trata de una medida “buena e ilusionante, no solo medio ambiental sino también socialmente hablando para los tiempos que estamos viviendo, y es una salida para personas de cualquier edad y, especialmente, para jóvenes”.
Por su parte, el Teniente alcalde de Obras y Urbanismo, Manuel Martínez López Alcorocho, afirmó que para llevar a cabo esta iniciativa se han aprovechado los recursos propios del Ayuntamiento. “Si no fuera esto ahora mismo no tendría ningún otro uso, solamente zona verde, porque estamos en una parcela que no se puede construir”, explicó Alcorocho, que recordó que el terreno tiene 4.250 m² y ha sido dividido en 26 parcelas para su cesión, además de crear casetas individuales destinadas al almacenamiento de las herramientas y útiles.
El proyecto
El Ayuntamiento de Valdepeñas ha puesto a disposición de desempleados, jubilados y entidades sin ánimo de lucro un total de 26 parcelas de entre 60 y 81 m² dotadas de agua para riego, vallado y tierra fértil, además de un cuarto individual de herramientas, con el fin de crear unos Huertos Ecológicos Urbanos. Se destinarán 14 parcelas a desempleados; 7 se concederán a usuarios que han cesado en la vida laboral por jubilación, invalidez o prejubilación; 4 parcelas estarán destinadas a entidades sin ánimo de lucro como colegios o grupos de consumo ecológico; y la parcela restante será propiedad del Consistorio para llevar a cabo en ella cursos o actividades.
Las concesiones se realizarán por dos años (prorrogables) y tienen una cuota simbólica de 50 euros a pagar en dos anualidades y una fianza de 50 euros para asegurar un uso correcto de las instalaciones.
L as parcelas cuentan con un vallado perimetral general e individual, además de accesos y casetas individuales de 2,5×1,5 metros para almacenar herramientas y ropa de trabajo. Además, las instalaciones están dotadas de iluminación, luz y agua de pozo, además de contar con un depósito de agua de 10.000 litros para casos de emergencia.