Daimiel Noticias.- La portavoz del equipo de Gobierno de Daimiel ha hecho público este jueves el informe que ha elaborado la Secretaría del Ayuntamiento al respecto de la situación laboral de la concejal de Servicios Sociales como monitora de los talleres de manualidades del Centro de Mayores.
«Ni existe ilegalidad, ni existe incompatibilidad, ni existe cohecho». Así se desprende del informe de legalidad que ha elaborado la Secretaría del Ayuntamiento al respecto de la situación laboral de la concejal de Servicios Sociales, María Carmen Torija como monitora del Centro de Mayores. En primer término, la portavoz del equipo de Gobierno, María Dolores Martín de Almagro, ha aclarado que el informe se ha redactado a petición del alcalde, Leopoldo Sierra, ya que, aunque la portavoz socialista, Cristina Maestre, también lo ha solicitado, no está facultada para hacerlo con su única firma. «Sigue sin aprender las vías reglamentarias, necesita la firma de un tercio de los concejales. Esto ya se le explicó hace unos meses, pero, o bien no lo leyó, o bien no se enteró», indicaba.
A continuación, Martín de Almagro subrayaba que el informe afirma que «es un hecho constatado que la citada concejal es una trabajadora por cuenta ajena y, en ningún momento ejerce de contratista o subcontratista del Ayuntamiento, una circunstancia -subrayó- que sí daría lugar a incompatibilidad».
Por ello, y ante las «gravísimas acusaciones sin pruebas o certezas» de la portavoz socialista, Martín de Almagro entiende que la actitud de Maestre demuestra una «manía persecutoria» hacia Torija. «Son continuas sus faltas de respeto, aprovechándolas para convertirlas en ataques personales a la menor ocasión», añadía.
Asimismo, la portavoz del ejecutivo municipal ha reprochado a Maestre que pidiera la supresión de los talleres y que solicitase la ampliación de la Unidad de Memoria cuando «desde que María Carmen Torija es concejal ha pasado de tener una duración de ocho meses a ser anual, y prácticamente se han doblado las sesiones semanales».
En este punto, ha leído un extracto de la carta que el Consejo de Mayores ha enviado al Alcalde y donde se pide textualmente que «sigan manteniendo las actividades como hasta ahora y a los monitores que imparten las mismas, entendemos que todo ello contribuye a mejorar la calidad de vida de los personas mayores».
Así las cosas, Martín de Almagro concluía que «si la señora Maestre tuviera un oficio ajeno al oficio político, respetaría un poquito más el trabajo que da de comer a los demás».