Más de 120 personas han participado hoy, 20 de abril, en la jornada “Vulcanólogos por un Día” organizada por Lafarge en colaboración con la Universidad de Castilla-la Mancha (UCLM). La jornada contó con la presencia del director de la fábrica de Lafarge en Villaluenga, Mariano García.
Los asistentes, trabajadores de Lafarge en Villaluenga y las oficinas centrales de Madrid así como sus familias, han aprendido a identificar restos volcánicos, rocas y minerales. Profesores del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio de la Facultad de Letras de la UCLM dirigieron la visita por la zona explicando cuales han sido los procesos por los que ha pasado el volcán de “Cerro Gordo”. Estos profesores forman parte del Grupo de Investigación: “Geomorfología Territorio y Paisaje en Regiones Volcánicas”.
Mientras los mayores hacían un recorrido por la cantera, los niños se centraron en la construcción de un volcán y en reproducir una erupción- siempre guiados por técnicos y provistos de los equipos de seguridad necesarios-. Se utilizó uno de los productos de Lafarge: Ceminstant’20, un mortero de rápido fraguado que permitió que los chavales construyeran su volcán en tan solo 20 minutos. La reacción química que simuló la erupción se obtuvo gracias a la mezcla de vinagre, colorante alimenticio y bicarbonato sódico.
Tras el almuerzo, pequeños y mayores se han desplazado hasta el Yacimiento Arqueológico de Oreto y Zuqueca (Ciudad Real) donde se pueden contemplar restos que abarcan desde época prerromana hasta la Edad Media. Destacan la Necrópolis Visigoda, el Baptisterio Paleocristiano y los Baños Islámicos, los más antiguos datados en la Península Ibérica.
En la cantera “San Carlos” se extrae puzolana para la elaboración de cementos en la fábrica de Lafarge en Villaluenga de la Sagra (Toledo). En un futuro, esta cantera contará con un Centro de Interpretación de Volcanes puesto en marcha tras el acuerdo firmado por la empresa (Lafarge) y la Asociación para el Desarrollo del Campo de Calatrava.
Desde hace 30 años, el Grupo Lafarge restaura los terrenos de sus canteras para darles una segunda vida, integrándolos en el paisaje natural y aportando un valor social, económico y ambiental adicional. Esta recuperación se realiza a través del diálogo con la población local y sus representantes, así como con organizaciones no gubernamentales.
En el año 2000, el Grupo Lafarge firmó un convenio de colaboración con WWF en el cual se incluía la puesta en marcha de una política sistemática de restauración de canteras para fomentar la biodiversidad. La compañía se ha comprometido a proteger todas sus canteras de acuerdo con los criterios marcados por esta ONG, así como a presentar un plan de fomento de la biodiversidad que preste atención a la flora y fauna más vulnerable, en colaboración con entidades medioambientales locales.
