Nota municipal.- Las procesiones de la Semana Santa Malagonera están siendo como todo el mes de marzo, pasadas por agua. Y es que el líquido elemento se ha convertido, en estos días festivos, en un triste protagonista que ha enturbiado de alguna manera la belleza que le dan a nuestro pueblo las imágenes de nuestros pasos.
El miércoles salió nuestro padre Jesús Nazareno para realizar un Via Crucis, que se pudo realizar pese a la constante amenaza de lluvia.
El jueves salió la procesión del Silencio, con la imagen de «El Dulce Nombre de Jesús en su prendimiento» acompañado de la Banda de cornetas y tambores «Nuestro Padre Jesús Nazareno» que consiguió procesionar con novedoso recorrido que dio aún más solemnidad a esta procesión.
En la mañana del Viernes Santo, Nuestro Padre Jesús Nazareno, acompañado por la banda de cornetas y tambores que lleva su nombre y Nuestra Señora de la Soledad ( Virgen de los Dolores) procesionaban hasta encontrarse en la Plaza del Santo. Allí les esperaba una inoportuna compañía, la lluvia, que deslució la segunda parte del recorrido de la procesión y obligó a los cofrades a acelerar el paso hasta llegar a la parroquia.
Pero sin duda la procesión más importante de la Semana Santa malagonera es la del Santo Entierro. La procesión estaba prevista para las 20:00 horas y minutos antes, una incesante lluvia y un desagradable viento, hacían acto de presencia. Estos elementos meteorológicos hicieron desistir, por temor a que la imagen sufriese daños, a los representantes de la Hermanad de la Virgen de los Dolores, que no procesionó por la razones anteriormente mencionadas.
El resto de hermandades decidió salir a pesar de la amenaza de lluvia y consiguieron, a pesar de las prisas finales y de algunas lloviznas poco intensas, que los vecinos de nuestro pueblo presenciasen este bonito acto de fe, que en los últimos años viene siendo perturbado por las inclemencias del tiempo.
El domingo, si el tiempo lo permite, Jesús Resucitado saldrá a las 13:00.