Daimiel Noticias.- La talla, donada de forma anónima en 1983, se quedó sin procesionar este domingo por la mañana debido al mal tiempo. Se trataba de la principal novedad de la Semana Santa 2013, ya que este desfile se unía a las procesiones daimieleñas cerrando la cronología de la Semana de Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
Se cierra la Semana Santa con una agridulce sensación. La inestabilidad meteorológica ha condicionado la salida de procesiones, su itinerario, e incluso, ritmo. La última en acusar las adversidades del tiempo ha sido la procesión del Resucitado, prevista para este domingo por la mañana. Se unía así a los desfiles, cerrando la Semana cronológica que se vive en Daimiel sobre la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo. Sin embargo, y pese a ser la principal novedad, la Junta de Hermandades se ha quedado sin estrenar la talla, donada en 1983.
La decisión se tomó después de la función de Resurrección, celebrada en la iglesia de Santa María. No daba lugar a dudas, la noche y amanecer previos, y una mañana en la que los chubascos no cesaron, propiciaban que quedara suspendida categóricamente. Se quedaba sin estrenar la procesión en la que iban a participar todas las cofradías y hermandades, cuyos nazarenos no portaban capillo.
Se había preparado un trono en plata, con faldillas en color negro en cuya parte delantera se presentaba bordada de igual simbología que el estandarte que porta en su mano izquierda la talla, una Cruz atravesada por una “R” que representa la Resurrección. El llamador y cuatro esquinas se iban a mostrar en plata, dos en la parte delantera y otras dos en la parte trasera. Habrá que esperar a que el tiempo respete en 2014 y pueda estrenarse en esa Semana Santa.