El Grupo Municipal Socialista ha salido hoy al paso de las declaraciones que hacía la semana pasada el concejal de Urbanismo y portavoz del equipo de Gobierno, Pedro Martín, presentando su gestión en la ciudad en el año 2012. Haciendo un símil culinario, Alberto Lillo, concejal socialista en materia de urbanismo, ha calificado esta gestión como la “deconstrucción” de la ciudad.
A juicio de Lillo, «lo que realmente ha ocurrido es que se ha producido una desestructuración del servicio de urbanismo, el servicio que diseña la ciudad, que marca su crecimiento, que debería acercar la ciudad a sus ciudadanos y hacerla más habitable, más saludable, más sostenible”. «Lo que realmente ocurre», continuó, “es que la ciudad no crece, se estanca, a la ciudad nuestra le han marcado un paso lento, es como si no quisieran, no pudieran o no supieran dar con el punto de conexión entre el crecimiento sostenido de la ciudad y un desarrollo armónico, de futuro, de modernidad”.
Para ilustrar su opinión puso como ejemplo lo que denominó “la última ocurrencia de nuestra alcaldesa Rosa Romero, quien parece ser que alentada por el interés vecinal, se dispone en un año con presupuesto inexistente en inversiones, a arreglar los jardines del Prado, o a desarreglar la belleza de unos jardines, que ya nuestros padres lo conocían como son. Una actuación que costará 320.000 euros, innecesaria en un momento tan difícil”.
Se refería también a la puesta en marcha de la Comisión de Accesibilidad, de la que Martín se congratulaba, recordando que «el PP rechazó una propuesta del Grupo Socialista relativa a la mejora de múltiples aspectos relacionados con la accesibilidad en nuestra ciudad -avalada por la Asociación Ciudad Real Accesible-, al tiempo que se siguen haciendo obras municipales totalmente inaccesibles». Además reclamaba «una mayor vigilancia en estas obras y en cualquier proyecto que pueda desarrollarse en la ciudad, pero la alcaldesa, ni está ni se le espera y al concejal, tampoco se le ve mucho por las calles. No se pasean por las calles, no hablan, viven en sus burbujas, no hay cercanía».
Y en este asunto de la accesibilidad se refería también al anuncio de la instalación en el Teatro Quijano de un sistema de bucles magnéticos para facilitar a las personas con dificultades auditivas el seguimiento de los actos. Lillo da la bienvenida a la medida, no sin preguntarse “si serán los bucles que iban a poner en su día en el fantasmagórico edificio del nonato Teatro Auditorio, que seguirá como lo dejaron, sin terminar, hundiéndose en la porquería, en las humedades y todavía sin explicar que van a hacer con él”.
Se congratulaba el concejal socialista del arreglo de la carretera de Las Casas, “petición del grupo socialista que también fue negada por el PP, motivada por el estado de la vía y por el peligro que supone para peatones y vehículos la situación actual de la misma”.
Criticó que la caída de la construcción de viviendas en un 77%, no sea una cuestión preocupante para el concejal de urbanismo, a quien solicitó medidas serias para dar solución a los problemas de vivienda de muchos vecinos, “dado que la reducción de los precios de las casas de la EMUSVI en un 20% es una medida a todas luces insuficiente”.
Y continuando con la crítica, hizo mención a que “la mitad de los proyectos de pavimentación aprobados en el año 2011 no se han realizado aun habiéndose adjudicado las obras por dejación municipal, obras que van destinadas fundamentalmente al centro de la ciudad, olvidando los barrios”. “Son remanentes de los años 2010, 2011 y algo del 2012, que además se lo ha dado la Diputación de Ciudad Real”, asegura.
Con todos estos ejemplos, concluía Alberto Lillo, “se desmonta claramente la versión del equipo de gobierno y queda demostrado que la política urbanística de esta ciudad es la de la inversión cero que además se está comiendo los ahorros del ayuntamiento». «¿Qué piensan dejar a las siguientes corporaciones municipales? Una ciudad en la miseria más absoluta, en la dejación de obras paralizadas, en las promesas incumplidas de los mega proyectos, Reino del Quijote, Teatro, Parking Torreón, segunda ronda, arreglos de los viarios, peatonalización progresiva de la ciudad, carril bici en la ciudad, no en las afueras, y un sinfín de promesas incumplidas y nunca realizadas ni reconocidas, y ahora arreglamos El Prado», dice el edil.
Por último, ofrecía el compromiso de que «cuando el PSOE gobierne en la ciudad, la prioridad de las obras, la necesidad o no de hacerlas, estará perfectamente planificada con conceptos de eficacia y sobre todo avalada con la participación activa de la ciudadanía a través de los Consejos de Participación Ciudadana y del Consejo de Sostenibilidad».
