Muchas asociaciones de periodistas de España realizan actividades esta semana coincidiendo con el patrón de la profesión (San Francisco de Sales), hoy, 24 de enero. “Los periodistas sabemos que nada tenemos que celebrar, pero también somos conscientes de que no debemos callar ante la dura situación que atraviesa el periodismo en España”, afirma Lidia Yanel, presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de Castilla-La Mancha.
Paro, expedientes de regulación de empleo, rebajas salariales y ofertas de trabajo sin remuneración, componen un cuadro desolador dentro del periodismo, que está inmerso en uno de los periodos más críticos de su historia. A ello se unen las constantes limitaciones a la libertad de expresión y al derecho de información con el recurso, sobre todo por los políticos, de las ruedas de prensa sin derecho a preguntas, un método reprobable porque hurta al ciudadano la respuesta a los problemas que condicionan su vida.
Las asociaciones de periodistas no hemos dejado de decir a lo largo de 2012 –y seguiremos así este 2013– que “dejar morir el periodismo es como dejar morir la democracia, porque los medios contribuyen a su sostenimiento promoviendo el debate cívico, el intercambio de ideas y actuando como contrapoder a fin de evitar los abusos”, según recoge el Manifiesto de la FAPE en defensa del periodismo que ha sido aprobado ya en numerosas instituciones incluyendo el Senado, parlamentos autonómicos, diputaciones y ayuntamientos (varios de ellos de Castilla-La Mancha).
El Manifiesto en defensa del periodismo desarrolla dos ideas básicas en que ha estado trabajando la FAPE y que apoyan miles de periodistas en España: sin periodistas no hay periodismo y sin periodismo no hay democracia.
Hoy, los periodistas llamamos de nuevo la atención de los ciudadanos y de las instituciones sobre la importancia de que la libertad de prensa y el derecho de información mantengan su solidez como pilares fundamentales de la democracia.
Nuestra profesión es más necesaria que nunca en su papel primordial de proporcionar a los ciudadanos la información independiente y veraz que les ayuda a ser libres. Y los periodistas estamos orgullosos de ejercer esta función democrática.
En esta línea, defendemos un periodismo basado en la lealtad a los ciudadanos y en el control de los poderes, sobre todo en un momento en el que los casos de corrupción destapan en nuestro país tramas de intereses que atentan contra la transparencia y la democracia.
No existen las soluciones milagrosas, pero los periodistas sabemos que tenemos que mirar al futuro y decir a la sociedad que el deterioro del periodismo daña a la libertad de información y de expresión, que constituye la base de todas las demás libertades y es el fundamento de la dignidad humana.
Las cifras
Desde que comenzó la crisis, en Castilla-La Mancha se han perdido varios cientos de puestos de trabajo de periodistas, empleos que será muy difícil, por no decir imposible, recuperar. En la provincia de Albacete, este mes de enero está siendo particularmente negro para los periodistas: el año ha comenzado con el anuncio del cierre del diario La Verdad y con el despido de nueve trabajadores en La Tribuna (en maquetación, imprenta y administración) que se suman a la decena de periodistas que habían perdido su empleo anteriormente.
En Ciudad Real, casi un centenar de periodistas han perdido su empleo desde que comenzó la crisis y en Cuenca, son más de 80 los empleos perdidos relacionados con los medios de comunicación en los últimos cinco años y, además, siete medios han cerrado.
En Guadalajara, desde enero de 2009, se han destruido alrededor de 140 puestos de trabajo en medios de comunicación, de los que un 70 por ciento son periodistas. Y en la provincia de Toledo, solamente en el último año han desaparecido medio centenar de puestos de trabajo.
Según el Observatorio de la Crisis de la FAPE, se eleva a 10.000 el total de periodistas que han perdido su empleo en España desde 2008. Y también desde ese año han cerrado, al menos, 197 medios de comunicación en el país (22 diarios, 132 revistas, 20 televisiones de todos los ámbitos, 4 radios, 10 gratuitos, 7 digitales y dos agencias) según el Informe Anual de la Profesión Periodística 2012 realizado por la Asociación de Periodistas de Madrid y presentado el pasado mes de diciembre.
Colegio de Periodistas
Ante este panorama, la Federación de Asociaciones de Periodistas de Castilla-La Mancha y la FAPE instan de nuevo al Gobierno de la comunidad autónoma a que apruebe el Colegio de Periodistas de Castilla-La Mancha, un compromiso de la presidenta, María Dolores de Cospedal, que todavía sigue pendiente.
Las asociaciones de Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Talavera de la Reina y Toledo, que aglutinan a medio millar de periodistas, llevan varios años promoviendo la aprobación de esta ley que dotará a la profesión de un órgano de derecho público para la representación y defensa de la profesión. En 2012, se han constituido los Colegios de Periodistas de Andalucía, País Vasco y Castilla y León, que se unen a los que ya existían en Cataluña, Galicia y Murcia.
Estoy de acuerdo en que el periodismo es necesario y que sin periodismo no hay democracia. Ojalá existiera un periodismo independiente y veraz, pero cada vez cuesta más encontrarlo y cada vez es más difícil hacerse una imagen de la realidad leyendo varios periódicos.
Gran parte de la falta de credibilidad de los medios viene motivada porque se llama «periódico» a lo que simplemente es un contenedor de notas de prensa de los partidos políticos. Es fácil comprobar, leyendo la prensa regional digital (e incluso en papel) que los artículos se repiten literalmente desde la primera hasta la última letra. Sólo se entrecomilla lo que supuestamente ha dicho el político de turno pero el resto, que lo ha escrito y enviado tal cual el gabinete de prensa del partido, se presenta como si corriera a cargo del redactor del periódico. Luego los ayuntamientos dedican parte del presupuesto a insertar publicidad en esos medios y todos contentos…menos los ciudadanos que no nos enteramos de nada. Particularmente estoy cansado de este tipo de «prensa» y pienso que hacen un flaco favor a la profesión de periodista. Pan para hoy y hambre para mañana (hoy ya). Suerte con las reivindicaciones.
Completamente de acuerdo contigo. Tenemos un periodismo que remeda a los pregoneros o voceros de otro tiempo. Los medios parecen la prolongación de los diarios oficiales. Da pena abrir los diarios, en papel o digital, para que nos cuenten durante tres días una misma noticia en futuro, presente y pasado. Y esa noticia suele ser la celebración de alguna fiesta tradicional, que por ser tradicional ya no es noticia.