Las familias de Argamasilla de Calatrava han tenido este viernes, 18 de enero, la gran oportunidad de aprender de la mano de una profesional terapeuta, cómo dar masajes a sus bebés o niños pequeños. Ha sido durante una charla que ha tenido lugar en el edificio consistorial y que ha seguido también la alcaldesa.
En los prolegómenos del acto, Jacinta Monroy enmarcaba esta cita en las políticas de infancia y atención municipal de su equipo de Gobierno, que recientemente se ha traducido también en la renovación de los elementos de juego de los parques infantiles y en la colaboración estrecha con los colegios de la localidad.
En el caso del masaje, la alcaldesa reconocía “que en este contexto de momentos complicados para las familias, está es una buena forma de estimular a sus pequeños y de rebajar el estrés, pero no solo del niño, sino de la familia”, valorando el papel terapéutico que tiene esta saludable práctica.
En estos términos se pronunciaba Susana Ortiz, experta en terapias naturales como es ésta y encargada de explicarla de manera práctica junto a un bebé y también con un muñeco. “Es sobre todo muy beneficioso dar masajes a bebés prematuros porque justo al nacer se meten en incubadoras y crean un rechazo al tacto y eso es algo que se debe inculcar desde pequeñitos”, afirmaba. Y reconocía que beneficia a quien lo da”, sobre todo a los padres, porque últimamente estamos muy estresados y qué mejor beneficio que desestresarse que dando un masaje a tu hijo”. Gracias a ello, unos y otros establecen “un vínculo mucho más afectivo”.
Esta especialista en reflexología, reiki, yoga, quiromasaje o masaje deportivo, apuntó que sobre los más pequeños se han de realizar “maniobras ascendentes para activar la circulación linfática y la sanguínea, equilibrándolo también a nivel emocional”. Asimismo, el masaje gastrointestinal, cuando todavía los intestinos no están formados, contribuye a aliviar el dolor abdominal característico en los recién nacidos. A partir de ahí, los pies son la parte del cuerpo donde más aconsejable es dar masajes.
Ortiz dijo que da igual el momento del día en que se pueda practicar, pero lo recomienda “antes de dormir o justo después del baño”. En este caso, se puede aplicar de paso una crema hidratante, de almendra a ser posible, pero la recomienda sin perfumes o sin aceites esenciales porque pueden provocar alergias en edades tan tempranas.
Por lo demás, todo son ventajas, no hay ninguna contraindicación y que no hay límite de edad, “mientras el niño quiera” apostillo, reconociendo que gracias a esta práctica se va creando una rutina diaria que al final beneficia a todos.
