UGT Castilla-La Mancha.- En enero, se pone en marcha el último invento de la Consejería de Educación en su empeño por despreciar a los docentes de esta región mediante la puesta en funcionamiento del Programa de Formación en el Aula para docentes sin empleo.
Algunos de los que van a cursar estas prácticas ya han impartido clase como docentes contratados por la propia Consejería de Educación que, en una pirueta normativa, ahora los va a hacer trabajar de forma gratuita y, aunque ya los contratara en otro momento y tuvieran alumnos a su cargo, ahora los va a someter a una evaluación en este periodo de formación.
Esgrimir, como lo hace, la condición de voluntariedad es una falacia imperdonable, pues el mismo Consejero ya dijo en una entrevista, publicado por la prensa el 12 de diciembre de 2012, que “quienes hagan las prácticas tendrán más oportunidades y más facilidades para obtener una plaza”. ¿No se pierde la voluntariedad ante dichas declaraciones?
Todo esto, Sr Consejero, podría estar muy cercano a lo que conocemos como explotación de trabajadores y digo de trabajadores porque Vd. confunde las prácticas de los estudiantes con las prácticas de las personas que ya tienen una titulación, sírvale como ejemplo las prácticas que los médicos hacen cuando acaban su formación universitaria, que son remuneradas como no podría ser de otra manera. Lo que van a hacer estos titulados, lo diga la resolución como lo diga, es trabajar, porque su titulación los faculta para ello, y no hacer prácticas, que ya las hicieron para conseguir titularse.
Pero, hablemos de las condiciones de estos “prácticos”. Díganos cuál es la responsabilidad de los mismos en su “forzada” práctica ¿qué ocurre si hay un accidente?, ¿quién les ampara?, ¿quién los defiende?, ¿quién…? Si el accidente lo sufre la persona en prácticas, ¿se considerará accidente laboral?, ¿a qué tendrá derecho? Son muchos los interrogantes que se plantean a una figura que se encuentra totalmente desprotegida, a la que hacen trabajar y a la que su resolución no le despeja ninguna duda.
Además, se está transmitiendo un mensaje negativo sobre la preparación que ofrece nuestra universidad, ya que el objetivo de su resolución es que los docentes puedan adquirir las nociones básicas orientadas a la práctica docente, nociones que ya se han recibido en la propia universidad. Esperamos que nuestras Facultades de Educación tengan alguna reacción y defiendan sus enseñanzas. FETE-UGT considera que sí, que nuestros alumnos salen más que preparados, y que lo único que necesitan es trabajar, pero, como todo el mundo, con un salario.
El colmo de su resolución, que contradice sus afirmaciones, es que las citadas prácticas no podrán computarse a efectos de servicio prestado en los procedimientos de acceso, provisión o promoción interna convocados por la Administración. A cambio de todo este despropósito, a los que realicen esta formación se les exige un rendimiento, no sólo tienen que obtener evaluación positiva en la función docente, sino en la elaboración de una unidad didáctica innovadora. ¡Qué desfachatez! Tienen que trabajar gratis y aportar materiales innovadores, y todo a cambio de una evaluación que no sirve, según su resolución, para nada.
Este nuevo invento de nuestra Consejería no deja de parecer extraño y no es exportable a ningún otro sector profesional, ni tiene cabida en nuestro ordenamiento laboral, en el que las prácticas en empresas –fuera del ámbito académico- están reguladas por un contrato que vincula al trabajador y al empresario, y con una remuneración y unas condiciones recogidas en el Convenio Colectivo.
Aunque, quizás, no estaría mal que los altos cargos de la Administración tuvieran unas prácticas gratuitas y se sometieran también a una evaluación.
Al finalizar el trabajo hay que informar al «Amo»??…. Dan comida y cama??… Dejan hablar con las mujeres??..