El sindicato CCOO ha denunciado hoy en un comunicado que la situación en las oficinas de empleo de la provincia «se agrava» tras el cese de la mayor parte de su personal a 31 de diciembre de 2012. «La falta de personal», aseguran desde el sindicato, «hace difícil atender a los desempleados y seguir prestando servicios que forman parte de la orientación para el empleo, que tanta importancia tiene en una provincia como la de Ciudad Real en la que el total de demandantes parados en la provincia ascendería a 69.629 en datos de diciembre».
Tras el cese de estos profesionales, explican, al menos tres oficinas de la provincia han quedado sin personal técnico: Almadén, La Solana y Villanueva de los Infantes. «Si tenemos en cuenta que entre las oficinas de empleo anteriores se quedan casi 4.000 desempleados sin orientación laboral, se evidencia claramente que la decisión de la Administración ha restado operatividad y ha dejado a muchos ciudadanos sin servicio, en momentos en los que la orientación laboral es la base de la búsqueda de empleo», apuntan desde CCOO.
Además, la supresión de las plazas de los orientadores de empleo tiene, a juicio del sindicato, consecuencias importantes, como el desequilibrio en la distribución de los técnicos. Así, explican desde Comisiones Obreras, oficinas como Alcazar de San Juan (3.937 desempleados), Tomelloso (5.444 desempleados), Manzanares (2.107 desempleados) o Valdepeñas (3.677 desempleados), entre otras, tan sólo cuentan con un técnico en la actualidad o una población como Puertollano sólo tiene dos técnicos para atender a de 7.366 demandantes parados según los datos de diciembre pasado.
«Esto trae consigo no sólo que se preste un servicio de menor calidad, sino incluso que los directores de las oficinas que no son personal cualificado para realizar la orientación estén llevando a cabo dichas acciones, como los itinerarios de inserción laboral de las personas perceptoras de la subvención PREPARA que estaban llevando los TAEs cesados, o incluso que el personal administrativo esté realizando tareas de orientación», denuncian desde CCOO.
El cese de estos trabajadores supone «un golpe definitivo» a las políticas activas de empleo, «así como que ahora se descuiden actividades como las charlas informativas a los desempleados o los talleres formativos que son una herramienta fundamental y que se han dejado de dar o la prospección de empresas que también estaban realizando los TAEs para potenciar el servicio de intermediación de ofertas y que ya se dejaron de hacer el verano pasado con el primer cese de TAEs (promotores de empleo), ya que había que atender a mayor número personas». «Esta actividad- explican- es primordial para hacer competitivo este servicio frente al resto de agencias de colocación de empleo privadas». «Está claro que lo que el Gobierno Regional ha pretendido con esta medida es hacer menos competitivos los servicios públicos de empleo con el fin de privatizarlos, como se ha manifestado en reiteradas ocasiones por distintos diligentes políticos del Gobierno de Mª Dolores de Cospedal», añaden.
Con el personal que ha quedado, dicen desde el sindicato, «es imposible realizar todas las tareas de orientación que se venían haciendo, ya que es imprescindible atender otras como autoempleo, gestión de ofertas de trabajo, entrevistas de clasificación, o selección del alumnado de cursos de formación, servicio Eures o extender el servicio de orientación a toda la población desempleada».
«Desde CC.OO. seguimos defendiendo un servicio público que ha funcionado bien y que se ha prestado siempre con calidad al ciudadano desempleado». El sindicato CCOO pide al Gobierno de Cospedal que dé marcha atrás en su modelo de gestión «que no garantiza mejor calidad, ni menos coste». Y, por último, demanda a la Consejería de Empleo que aclare cual va a ser el modelo de orientación que van a hacer las agencias privadas con ánimo de lucro.