El sindicato CSI·F ha denunciado en comunicado que la ampliación de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas semanales, «además de suponer un retroceso en los derechos de los trabajadores, ha provocado en su aplicación una gran discriminación para determinados colectivos de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, como por ejemplo, los más de 500 trabajadores de las residencias de mayores de la provincia de Ciudad Real que tienen turnos de mañana-tarde-noche, como auxiliares de enfermería y ordenanzas, que seguirán trabajando 16 días más que el resto de sus compañeros».
Según el sindicato, «mientras la mayoría de los trabajadores hacen diariamente esa ampliación de media hora, en la consejería de Salud y Asuntos Sociales y más concretamente en los centros donde hay colectivos que trabajan a turnos, como las residencias de mayores, se seguía haciendo la misma jornada con el mismo horario, por lo que esos 30 minutos se iban acumulando en una especie de saco de horas que al final implicaba quitar al trabajador 16 días de sus descansos anuales».
CSI·F ha denunciado que mientras el resto de trabajadores hacen 223 días, estos otros trabajan 239 días al año y valora que ante sus peticiones reiteradas «se hayan recuperado esos 16 días y la Junta de Comunidades haya decidido que los compañeros que trabajan en turnos de mañana-tarde sí pueden hacer diariamente esa ampliación de jornada, es decir, media hora más cada día».
CSI·F seguirá demandando a la Junta «que se supere esta discriminación y se permita que todos los afectados trabajen y descasen los mismos días, sin esperar a que lo resuelvan los Tribunales».
