El pasado día 11 se realizó en la Central de GICC de ELCOGAS un simulacro de emergencia consistente en una supuesta fuga de gas, provocando una nube de gas bruto que conllevó una orden de refugio preventivo para todas las personas que se encontraban en las instalaciones en ese momento. Como resultado del incidente se procedió, además, al rescate de dos trabajadores que realizaban sus labores en un espacio confinado.
Como consecuencia, se activaron todos los mecanismos previstos en el Plan de Emergencia Interior (PEI), en grado 2, constituyéndose el Centro de Control de Emergencia (CCE) liderado por el director de Explotación, Máximo de la Hermosa Rodríguez, y el Centro de Control avanzado, ubicados en las oficinas principales de la Planta y en Sala de Control, respectivamente. En esta ocasión se contó con la asistencia, como observadores, de personal de la Dirección general de Protección Ciudadana del Gobierno de Castilla-La Mancha.
El resto de observadores, trabajadores de ELCOGAS designados previamente, fueron los encargados de supervisar las reacciones del personal ante esta circunstancia y anotar las posibles deficiencias o errores de actuación. En la reunión posterior al simulacro se constató su resultado satisfactorio, a la vez que se introdujeron propuestas de mejora de algunos puntos específicos del PEI.
Según informa la empresa, ELCOGAS ha tenido una especial preocupación con los aspectos relativos a la seguridad, «preocupación que ha sido transmitida a sus trabajadores, que también los han considerado básicos en su quehacer diario».
«El día 11, todos ellos actuaron según el procedimiento interno incluido en el PEI, por lo que se concluye que el simulacro, que finalizó aproximadamente una hora más tarde de su comienzo, se desarrolló con total normalidad, y que toda la organización implicada actuó satisfactoriamente», señala la empresa.