El Hospital General de Tomelloso ha implementado un protocolo de gestión clínica avanzada mediante un sistema de estandarización de procesos asistenciales. La medida consiste en ajustar todos los pasos de un mismo proceso a un modelo prediseñado y consensuado previamente con los profesionales implicados.
Así, el protocolo diseñado por la dirección del centro fija, entre otras cosas, los pasos a seguir por el especialista en una primera consulta que contempla la realización de la historia clínica del paciente, la exploración física previa a la elaboración del diagnóstico diferencial, la solicitud de pruebas complementarias y la prescripción de un tratamiento provisional.
Según el proceso estándar, en una segunda consulta el especialista revisará los informes previos y evaluará los resultados de las pruebas solicitadas para elaborar un informe definitivo del cual se informará al paciente a la vez que se le explicará el programa terapeútico a seguir. En último término, el paciente planteará sus dudas y recibirá las recetas oficiales que correspondan.
De esta forma, se crea una herramienta útil que unifica criterios asistenciales y terminologías comunes, mejorando así la comunicación con los pacientes y entre los propios profesionales. El uso de este sistema repercute directamente en una mejor práctica de los cuidados y una gestión clínica avanzada.
Reducir la probabilidad de error
La repetición regular de un proceso determinado reduce la probabilidad de error y refuerza la seguridad de la práctica médica. Está comprobado que “la estandarización de procedimientos es una práctica asistencial avanzada que a medio plazo minimiza riesgos y garantiza una actividad con todas las garantías para el paciente”, explica Miguel Ángel Baratas, gerente del Hospital General de Tomelloso.
Según Baratas, el propósito de aplicar un protocolo o estándar de gestión es “mejorar la respuesta que se ofrece al paciente del proceso clínico y potenciar la calidad asistencial del hospital en su conjunto”.