El colectivo Salvemos Las Tablas ¡YA! ha puesto en marcha la campaña «Ya toca un Plan de Gestión (PRUG) para Las Tablas de Daimiel». La primera acción de esta iniciativa consiste en la recogida de firmas de apoyo a una carta dirigida al ministro Arias Cañete en la que se exige que, después de 40 años desde la declaración de este espacio como Parque Nacional, se haga cumplir la Ley de Parques Nacionales y se apruebe esta herramienta de gestión obligatoria que sirva para dar cauce a la participación ciudadana e involucre a todos en la defensa de este bien natural y cultural.
Pueden firmar aquí:
http://www.change.org/es/peticiones/ya-toca-un-plan-de-gesti%C3%B3n-prug-para-las-tablas-de-daimiel
Asimismo, el día 16 de Diciembre en el Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, se realizará una nueva acción integrada dentro de esta campaña y en la que se recogerán más firmas de apoyo.
«Queremos recordar -dicen desde Salvemos Las Tablas ¡Ya!– que no es la primera vez que este colectivo demanda un PRUG». «Desde el 2009 venimos denunciando que la carencia de este documento está detrás de algunas actuaciones graves dentro del Parque Nacional y que han afectado a la conservación de los valores naturales y culturales por las que fue protegido»- explican. Fruto de aquellas demandas, el Organismo Autónomo de Parques Nacionales inició un proceso en el que el colectivo Salvemos Las Tablas ¡Ya! participó junto a científicos, técnicos o conservacionistas en la elaboración de un documento de criterios y directrices para la gestión del Parque y que debía ser la base para el futuro PRUG. Una vez redactado dicho documento, lamentan, «el proceso se paró sin que sepamos hasta la fecha de hoy las razones».
En la carta al ministro, Salvemos Las Tablas ¡Ya! defiende que la falta de PRUG provoca que la gestión del Parque vaya a la deriva y que se tomen determinaciones arbitrarias e incluso contradictorias o perjudiciales. «Y que cada director/a circunstancial pueda llevar a cabo líneas de actuación y tener criterios estrictamente particulares, ordenando las actividades según su propio criterio o interés, en muchos casos contrario al interés general, lo que en la práctica se traduce en una gestión privativa y nefasta».
Desde el colectivo piden que el procedimiento de elaboración del PRUG incluya trámites de audiencia a los interesados, información pública y consulta a las Administraciones Públicas afectadas, así como un trabajo intenso en el Patronato.
