El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, ha destacado que en la región “hemos conseguido ahorrar un 21 por ciento en el transporte sanitario no urgente manteniendo la calidad del servicio”. En este sentido, ha afirmado que “los pacientes son lo primero para el Gobierno de Castilla-La Mancha y deben tener siempre garantizada una asistencia de calidad”.
Durante su intervención en las I Jornadas de Transporte Sanitario no Urgente, el consejero ha explicado que mientras en 2011 la partida para este fin ascendió a 80.467.787 euros, en 2012 la cantidad es de 63.471.004 euros. Dicho ahorro, ha explicado Echániz, “se ha logrado gracias a las medidas de ajuste del Plan de Garantía de los Servicios Sociales de Castilla-La Mancha, que nació de la voluntad de lograr un sistema sanitario sostenible y viable”.
El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales ha hecho hincapié en que en nuestra región se trasladan en ambulancias no urgentes una media de 2.800 personas diarias: 1.700 pacientes y 1.100 acompañantes, la mayoría de ida y vuelta a consultas, rehabilitación, hemodiálisis, ingresos, etc. Y, ha añadido, que “el transporte sanitario es un servicio transversal, que nos permite no sólo transportar pacientes al o desde el sistema sanitario, sino moverlos entre centros optimizando servicios que se comparten para todos los ciudadanos de Castilla-La Mancha, independientemente de donde estén ubicados físicamente”.
Nueva etapa
Asimismo, durante su intervención, José Ignacio Echániz ha destacado que “se ha iniciado una nueva etapa para el transporte sanitario no urgente en la que la colaboración entre los actores implicados, pacientes, empresas y Administración, será fundamental”.
En este sentido, se ha referido al RD 16/2012 en el cual el transporte sanitario no urgente forma parte de la cartera de servicios común suplementaria del Sistema Nacional de Salud, sujeto a prescripción facultativa por razones clínicas. “Una medida –ha explicado- que busca poner orden, razón y control y que se ha tomado con el único fin de salvar el sistema sanitario”.
Asimismo, ha señalado que en esta nueva etapa “la formación y acreditación profesional va a estar más regulada gracias al Real Decreto 836/2012, que aborda la normalización de las características técnicas de los vehículos y sobre todo la formación de los profesionales que trabajan en las ambulancias”.
En esta línea, ha subrayado que “este texto marca unas pautas de conocimiento y experiencia que, sin duda, redundarán en una mejor calidad de la atención a los usuarios del transporte sanitario”.