Gracias a Miguel Torres Más, Juan Gregorio Álvarez Calderón y Mariano García Consuegra se conoció la historia de la cofradía de «Los Blancos», las tesis del sacerdote daimieleño Manuel Muñoz de Morales, y los efectos de la gripe de 1918 en Daimiel.
Daimiel Noticias.- La historia y evolución de la cofradía del Cristo de la Expiración, «Los Blancos» fue el punto de partida de la cuarta sesión de las Jornadas de Historia sobre Daimiel. En un de nuevo abarrotado patio interior del Museo Comarcal, incluso hubo gente que siguió las exposiciones en la galería de la primera planta, Miguel Torres Mas recorrió las principales etapas de una cofradía cuyo origen se remonta a 1836 cuando la imagen del Cristo de la Expiración pasó de la orden de los Carmelitas Descalzos a la parroquia de Santa María.
176 años de devoción que, como explicó Torres Mas, han evolucionado paralelamente a la circunstancias sociales y económicas del municipio, desde la pérdida de prácticamente todo su patrimonio durante la Guerra Civil a la recuperación y aumento de éste durante el siglo XX y principios del actual.
La segunda ponencia, a cargo de Juan Gregorio Álvarez, profundizó en la obra del sacerdote y teólogo daimieleño, Manuel Muñoz de Morales, que, a caballo entre el XIX y el XX, desarrolló una sólida obra siguiendo «estrictamente la ortodoxia tomista» (de Santo Tomás de Aquino). Más allá de sus postulados y de sus respuestas a las diferentes corrientes tanto teológicas como filosóficas, Álvarez quiso poner de relieve que dentro de la historia de Daimiel «la universalidad de la ideas» también tiene que compartir espacio con otras ciencias o artes.
La rúbrica la puso el pormenorizado estudio de las consecuencias de la gripe española de 1918 y de otras crisis demográficas en Daimiel, de Mariano García-Consuegra, que también ha investigado sobre ello en toda la provincia. Entre los datos que expuso constató que a la mortalidad registrada le siguió un aumento de la natalidad que contrarrestó sus efectos en el crecimiento natural, aunque esta media de fallecimientos en el municipio fue mayor que la media provincia y nacional.
Entre el público se encontraba el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, y la concejal portavoz, María Dolores Martín de Almagro, además de cargos directivos y hermanos de la cofradía de «Los Blancos», y los ya fieles a estas jornadas.