El consejero de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín, ha anunciado hoy que en el próximo mes de noviembre se pondrá en marcha la nueva Unidad de Apoyo al Profesor (UPA), encargada de asesorar, informar y proteger al docente cuando sea víctima de acoso o de maltrato durante su trabajo.
Esta nueva unidad será una oficina exclusiva dentro de la Consejería de Educación y, además de asesorar al docente ante un posible caso de maltrato, realizará labores continuas de información, cursos, actividades y acciones similares.
El consejero ha hecho este anuncio en las I Jornadas sobre Maltrato Infantil y Juvenil en el Ámbito Educativo que se han celebrado hoy en Guadalajara, donde ha destacado que el Gobierno está “plenamente implicado” en la lucha contra el acoso y la violencia en las aulas”.
Precisamente en este contexto, el consejero ha anunciado el nacimiento de la UPA como “una nueva unidad administrativa, con plena capacidad y a pleno rendimiento”, como “el instrumento para que los docentes puedan pedir ayuda y asesoramiento ante un hipotético caso de acoso” y un lugar “donde una serie de profesionales podrán orientarle y ayudarle”. Esta unidad contará, además, con un teléfono de apoyo al docente, que estará a disposición del profesorado todos los días del año.
“La prevención ante los casos de acoso y la solución a estos problemas es una labor que ha de llevarse a cabo de forma conjunta, sin fisuras y con plena transparencia por parte de todos los observadores. Por ello, es fundamental la labor de estrecha colaboración entre las diferentes administraciones para luchar, evitar y reducir cualquier indicio de maltrato, acoso o violencia en el ámbito educativo o familiar”, ha señalado Marín.
A su juicio, “es necesario establecer todos los cauces y medidas necesarias para tratar de erradicar cualquier actitud que pueda suponer para niños, jóvenes y docentes una amenaza contra su integridad física, psíquica o moral”.
Precisamente, y en referencia a los menores, el consejero ha asegurado que “en una sociedad moderna y desarrollada es fundamental que se preserven y se protejan los derechos de los más débiles”.