La portavoz de Agricultura del PSOE en las Cortes de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha denunciado esta mañana que “la subida brutal de tasas, el verdadero impuesto revolucionario que Cospedal quiere cobrarle al sector cinegético en la región y que hemos podido comprobar en los Presupuestos de la Junta para el año 2013, pone en peligro miles de cotos y miles de empleos directos e indirectos en nuestra comunidad autónoma”.
Fernández se pronunciaba de esta manera en una comparecencia de prensa en la que explicaba que el Proyecto de Ley de Presupuestos del Gobierno regional contempla unos ingresos por tasas a la caza superiores a los 16 millones de euros, “lo que se traduce en el cobro de 2 ó 3 euros por hectárea a las cotos de caza de Castilla-La Mancha. Si tenemos en cuenta que el coto medio en la región cuenta con unas 10.000 hectáreas, Cospedal quiere cobrar entre 20.000 y 30.000 euros más por coto el año que viene”.
Unas cifras que, según la diputada socialista, “hacen imposible la sostenibilidad del 95 por ciento de los cotos, que tienen unos costes fijos anuales de 50.000 euros y son sociedades sin ánimo de lucro, gestionadas por los propios cazadores, que no dan beneficios y que no podrán asumir que, de un año para otro, se duplique el dinero que necesitan simplemente para seguir con la actividad”.
Fernández explicaba que más de 5.400 de los 5.700 cotos que existen en Castilla-La Mancha se explotan bajo la fórmula de gestión directa de sociedades de cazadores: “No dan beneficios, pero sí dan muchos empleos directos y muchos jornales, 6.500 y más de un millón y medio de jornales, y ayudan a fijar la población al medio rural. Salen lo comido por lo servido, así que si, de repente, tienen que pagar casi el doble en tasas, el coto no se podrá mantener o se mantendrá sin ningún tipo de garantía: sin guarda, sin personal que planifique la caza y el mantenimiento de las especies…”
Por último, la portavoz socialista proponía tres alternativas al Gobierno de Cospedal “para evitar tener que imponer este auténtico impuesto revolucionario que pone en riesgo al sector: Que retire la subida de tasas y las negocie con el sector en el marco de la futura Ley de Caza, que retome la línea de ayudas a la caza que contemplaba el anterior Gobierno con el Plan de Desarrollo Rural y que negocie ayudas medioambientales al sector en la negociación de la futura Política Agraria Común”.