Ecologistas en Acción Castilla-La Mancha ha advertido de la intención de la Consejería de Agricultura de desclasificar el mayor número posible de refugios de fauna existentes en la Red de Áreas Protegidas de Castilla-La Mancha para sacar a subasta pública la caza en estos terrenos que, precisamente, se encuentran protegidos para evitar que se cace en ellos dados sus especiales valores faunísticos y la fragilidad de éstos ante la presión cinegética.
«Cuando la semana pasada salieron a subasta pública los rebaños de ovejas y vacas autóctonas que la Junta de Castilla-La Mancha tiene para investigación en el refugio de fauna del Dehesón del Encinar (Oropesa-Toledo) saltaron las alarmas y alertaron a Ecologistas en Acción de los planes de la Junta», señala la organziación, para la que «este proyecto tiene como finalidad sacar a subasta pública la caza en estos terrenos que, precisamente, se encuentran protegidos para evitar que se cace en ellos dados sus especiales valores faunísticos y la fragilidad de éstos ante la presión cinegética».
En Castilla-La Mancha hay 35 refugios de fauna en las cincos provincias que ocupan un total de 15.549 hectáreas, una superficie mínima de la región (0.19 %) en comparación con la superficie ya dedicada a la caza (88%).
La figura de Refugio de Fauna en Castilla-La Mancha deriva de la Ley de Caza 2/1993 pero estos espacios, como zonas sensibles declaradas por la Ley 9/99 de Conservación de la Naturaleza forman parte de la Red Regional de Áreas Protegidas y se encuentran incluidos, en su inmensa mayoría, en la Red Natura 2000 de la Unión Europea. Algunos también son zonas críticas de especies en peligro.
Según Ecologistas, la fragilidad de estos espacios por su reducido tamaño, sólo dos de ellos superan las 1.000 hectáreas y la mayor parte no supera las 700, y la presencia de especies particularmente sensibles a la caza en espacios reducidos como el águila imperial ibérica, la cigüeña negra, la malvasía cabeciblanca, la cerceta pardilla, el flamenco o incluso el lince ibérico, hace que en estos lugares sea esencial mantener, si no aumentar, su nivel actual de protección. De hecho, en estos espacios que se asientan siempre sobre terrenos públicos se vienen desarrollando numerosas actuaciones de conservación e invirtiendo fondos de proyectos europeos como los Life.
Para Ecologistas en Acción sería «demencial» que ahora, con el fin de obtener sacar unos pobres beneficios económicos subastando la caza, unos pocos se aprovecharan de las buenas condiciones ecológicas de estos espacios conseguidas con años de buena gestión e inversión de fondos públicos.
Ecologistas en Acción se ha dirigido ya a la Dirección General de Montes y Espacios Naturales solicitando información concreta sobre esta iniciativa y haciendo expreso su rechazo a la misma.