El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de zona arqueológica, el Castro de los Rodiles, en Cubillejo de la Sierra de Molina de Aragón, el poblado de Castilviejo, en Cubillas del Pinar de Sigüenza y el poblado de Peña Moñuz, en Olmeda de Cobeta, todos en la provincia de Guadalajara.
Además de su privilegiada ubicación, el yacimiento de Los Rodiles es uno de los enclaves celtibéricos más grandes de la zona, con un importante sistema defensivo y un previsible urbanismo que debió actuar como núcleo vertebrador de la comarca. No se ha excavado ningún yacimiento de esta época y de estas características en toda la provincia ni tampoco demasiados en regiones limítrofes.
Se vienen realizando excavaciones arqueológicas desde el año 2006, que han proporcionado interesantes resultados que refrendan la relevancia de este yacimiento.
El Poblado de Castilviejo está situado al norte de la provincia de Guadalajara, dentro del partido judicial y término de Sigüenza, entre los pueblos de Guijosa y Cubillas del Pinar, cuya línea de demarcación cruza precisamente por la altura cimera del cerro donde se asienta el yacimiento.
De las estructuras documentadas en el poblado destaca el sistema de defensas, compuesto por una muralla con varios codos y una torre, foso y friso de piedras hincadas o «caballos de frisia». Las intervenciones realizadas han puesto de manifiesto la ocupación del cerro en diversos momentos, especialmente durante la Edad del Hierro, celtibérico pleno y época islámica.
Peña Moñuz es un asentamiento fortificado mediante un complejo sistema defensivo que consta de tres partes. Desde el año 2006, este yacimiento está siendo excavado sistemáticamente, lo que está permitiendo poner al descubierto la totalidad del trazado de la muralla y de las tres torres que lo flanquean, así como investigar el trazado urbanístico del interior del recinto con el consiguiente descubrimiento de diversas dependencias, algunas de las cuales albergaron zonas de molienda y almacén de alimentos, otras parecen estar relacionadas con el trabajo del metal, y otras a residencia propiamente dicha.
Nueva Comisión Regional de Cambio Climático de Castilla-La Mancha
Por otro lado, y a propuesta de la Consejería de Agricultura, el Consejo de Gobierno también ha aprobado el decreto por el que se crea la Comisión Regional de Cambio Climático de Castilla-La Mancha, que sustituye a la anterior Comisión Regional de Coordinación de Políticas de Cambio Climático, y que no supondrá ningún coste a los ciudadanos de la región.
Esta comisión, que estará presidida por la consejera de Agricultura del Gobierno regional, María Luisa Soriano, contará con representantes de todas las consejerías del Ejecutivo castellano-manchego, reduciendo el número de componentes de la misma.
Desde la Comisión Regional de Cambio Climático se coordinarán las políticas en la materia y se impulsarán medidas de ahorro energético en la Administración castellano-manchega.
Por tanto, además de suponer un importante beneficio medio ambiental, se trata de una medida que también conlleva ahorro económico.