Se ha hecho justicia a siglos de una historia apasionante y a un legado patrimonial, natural e industrial de sobrecogedora belleza. Pero no sólo eso: la declaración de Almadén como Patrimonio de la Humanidad por el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, acaecida en San Petersburgo hace unas horas, es una emocionante reparación a centurias de esfuerzo, sangre y sufrimiento.
El pueblo y las minas de Almadén, escenarios de una historia que tiene sus albores en la Antigüedad y se ha prolongado durante siglos con el dolor, esfuerzo y sufrimiento de esclavos, forzados y condenados, de mineros y de trabajadores del mercurio, han tenido hoy su merecido y definitivo homenaje.
La localidad, declarada Patrimonio de la Humanidad por el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, ha recibido la mejor noticia en décadas, tras dos intentos fallidos, en 2009 y 2010.
El reconocimiento de la candidatura de Almadén (presentaba de manera conjunta con la ciudad eslovena de Idria) supone, al menos potencialmente, un nuevo recurso para la recuperación de esta deprimida, aunque bellísima comarca ciudadrealeña, que atesora una de las minas visitables más bellas y espectaculares de Europa.
El Comité ha reconocido su valor como las minas de mercurio más grandes del mundo y ejemplo único de la explotación de este metal a lo largo de los siglos. Asimismo, ha destacado que estas minas conservan un rico patrimonio material, que refleja las diferentes etapas del desarrollo científico aplicado para la extracción de este mineral.
Cospedal felicita a los vecinos de Almadén
Por su parte, la presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, ha felicitado al alcalde y a los vecinos. La presidenta ha mostrado “el orgullo” que supone esta declaración, en una región como Castilla-La Mancha, que cuenta con dos Ciudades Patrimonio de la Humanidad, como son Toledo y Cuenca, desde 1986 y 1996, respectivamente, y varios enclaves incluidos en el «Arte rupestre del arco mediterráneo de la Península Ibérica», en concreto en las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara, desde 1998.
En este sentido, ha reiterado el compromiso de su Gobierno “con el rico y extenso patrimonio cultural, natural y medio ambiental de Castilla-La Mancha, con su conservación y difusión, de cara a conseguir que sea un potente atractivo para el conocimiento de nuestra región y su disfrute por todos los turistas que vienen a visitarnos”.
Los empresarios recuerdan que la situación de Almadén «debe cambiar»
La Asociación Comarcal de Empresarios de Almadén y CEOE-Cepyme de Ciudad Real han mostrado su satisfacción y alegría por el nombramiento a las Minas de Mercurio de Almadén como Patrimonio de la Humanidad.
Las organizaciones empresariales sostienen en un comunicado que «siempre han defendido la importancia de este nombramiento, ya que se reconoce el esfuerzo, el tesón y la labor no sólo de los mineros de esa localidad, sino de toda una población y comarca, que ha dado mucho por España durante siglos».
La Asociación y CEOE-Cepyme de Ciudad Real espera que este nombramiento «suponga situar a Almadén donde se merece desde hace largo tiempo, y que se cumplan todas las demandas del sector empresarial en cuanto a infraestructuras, inversiones, etc., que hagan que esta comarca salga de la grave situación de crisis que viene lastrando desde hace muchos años».
«La situación de Almadén y su comarca debe cambiar, y se debe aprovechar este nombramiento para, de una vez por todas, dar un salto adelante y que sea conocida la riqueza turística, paisajística, patrimonial, de las propias minas, etc., de una comarca olvidada durante años», subrayan los empresarios.
