El alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, ha situado en el centro del análisis de su primer año de gobierno la deuda que arrastra el Ayuntamiento y la empresa municipal EMUMASA para entender “las grandes dificultades” a las que se ha tenido que hacer frente. Así, defendía que sólo poder “mantener a flote el consistorio es un logro muy importante”.
Daimiel Noticias.- El alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, ha situado en el centro del análisis de su primer año de gobierno la deuda que arrastra el Ayuntamiento y la empresa municipal EMUMASA para entender “las grandes dificultades” a las que se ha tenido que hacer frente. Así, defendía que sólo poder “mantener a flote el consistorio”, sin tocar la cartera de servicios, pagando puntualmente las nóminas de todos los trabajadores municipales y ahora saldando lo que se debía a los proveedores hasta final de año “es un logro muy importante, a pesar de que la oposición diga que no hacemos nada”.
Sierra no ha dudado en calificar la situación económica del Ayuntamiento de “muy delicada, sin liquidez y sin apenas capacidad de maniobra”. Así le reprochaba al anterior equipo de Gobierno socialista que la legislatura pasada elevara el nivel de endeudamiento hasta el 115%, lo que conllevó a multiplicar por dos el monto total de la deuda. Y lo que, a juicio de Sierra, es más grave “echando a perder los 5 millones de euros que llegaron por el Plan E”. “No se ha podido despilfarrar más en crear tan poco”, remarcaba. Todo ello, añadía, fomentado por “una de los peores decisiones que tomó el gobierno Zapatero, la supresión de la ley de estabilidad presupuestaria, que provocó que los políticos fueran muy ligeros en el gasto y que llevó al error de creer que el dinero público no es de nadie, como apuntaron algunos dirigentes socialistas”.
Con este telón de fondo, el alcalde daimieleño entiende que la austeridad en las administraciones públicas es la clave que ayudará a remontar el vuelo. “No se puede gastar más de lo que se ingresa” y a partir de ahí, continuaba, “para poder crecer necesitamos reducir nuestro volumen de deuda”. “Si en un par de años pasamos de pagar como ahora más dos millones en euros en amortizaciones e intereses, a pagar la mitad, esa diferencia la podremos destinar a inversión, y por tanto, crear empleo”.
En este punto, pedía confianza y tiempo para que las “duras” medidas que se están tomando desde los gobiernos central y autonómico den sus frutos. “Sabemos que se nos votó para cambiar el rumbo y tener ilusión en el futuro, pero estamos atravesando un momento muy difícil y para eso necesitamos que todos rememos en la misma dirección”. Respaldo y comprensión que decía haber encontrado en los daimieleños para los que “desde el primer día solo tengo palabras de agradecimiento”. “Hay familias que están en una situación límite y por eso, aunque no es fácil de explicar lo que está pasando, los planes de empleo se han destinado a los que menos tienen”, indicaba.
El presupuesto, ya listo
Precisamente, esa preocupación es la que ha llevado a que en los presupuestos se vaya a implementar una partida de “unos 160.000 euros” para reforzar las ayudas de los planes que ha puesto en marcha la Diputación Provincial en materia de empleo. A continuación, Leopoldo Sierra confirmaba que la fecha para el debate de las cuentas municipales será el lunes 2 de julio, en pleno ordinario, y que los grupos de la oposición ya tienen la memoria en su poder, “un tiempo mucho mayor de los tres o cuatro días con los que contábamos nosotros antes”. De aquí al pleno se celebrarán comisiones informativas de Hacienda y Régimen Interior donde podrían incorporarse enmiendas siempre que vayan “en la dirección de la austeridad y en el ahorro de gastos prescindibles, no en la de pintar dinero”, matizaba. Recursos que se destinarían íntegros a la bolsa de empleo habilitada.
En este balance, Sierra también respondía a las preguntas sobre el papel de la oposición. Así a la portavoz socialista, Cristina Maestre, le afeaba su ausencia de la política municipal donde “ni está ni se le espera”. “Viene una vez al mes, me pone a caldo en el pleno y después sigue con sus tareas regionales”, comentaba. Además, el primer edil entendía que se debía haber explicado con más claridad las diferentes renuncias que se han sucedido en el Grupo Socialista desde el mismo día en que se abrió la legislatura. Respecto a Izquierda Unida, sí valoraba la implicación de su portavoz y agradecía que Galo Sánchez-Bermejo haya reconocido públicamente la fluidez de la información que solicita.
Así las cosas, y aunque las ideas de IU sean diametralmente opuestas a las del PP, Sierra veía con mejores ojos las mociones que se centran en proyectos locales como los contenedores para reciclaje de aceite o para mejorar la eficiencia de la depuradora, que aquellas que no pasan por el ámbito competencial del Ayuntamiento. No obstante, el alcalde afirmaba que “no se van a rehuir debates, a pesar de que no podamos decidir al respecto”.
