El trabajo Sistema móvil para la detección y valoración del estado de fragilidad en personas ancianas del estudiante de doctorado y personal de investigación de la Escuela Superior de Informática en el Campus de Ciudad Real ha quedado finalista en el VI Premio Treelogic al Espíritu Innovador. Este proyecto, que se sirve de los dispositivos móviles de última generación, permitirá a los facultativos ser más precisos en su diagnóstico.
Jesús Fontecha Diezma, estudiante de doctorado y personal de apoyo I+D en la Escuela Superior de Informática de la Universidad de Castilla-La Mancha, con su trabajo Sistema móvil para la detección y valoración del estado de fragilidad en personas ancianas, ha sido finalista de la sexta edición del Premio Treelogic al Espíritu Innovador, un galardón que tiene por objetivo reconocer, estimular y difundir la iniciativa innovadora de los universitarios.
El proyecto desarrolla los progresos conseguidos por Fontecha Diezma en su trabajo de doctorado dentro del grupo de investigación MAmI. El mismo utiliza las tecnologías integradas en los teléfonos móviles de última generación para detectar y valorar el estado de fragilidad de las personas ancianas, aportando mayor objetividad y precisión que los métodos actuales.
El sistema ideado por Fontecha se sirve de los mecanismos acelerómetros del teléfono móvil para obtener y analizar los datos procedentes de las actividades de marcha y equilibrio realizadas habitualmente en el ámbito geriátrico, -Tinetti y Get-Up and Go-, durante las cuales el paciente porta en su cintura el dispositivo móvil, en una posición preestablecida y siguiendo las indicaciones del facultativo. Esto, combinado con el procesamiento conjunto de los distintos factores de riesgo relacionados con la fragilidad y que son extraídos del historial clínico del paciente, permite ofrecer al facultativo un soporte esencial en la detección y diagnóstico de la fragilidad en el momento de su valoración desde el propio dispositivo móvil.
Retrasar o reducir el estado de fragilidad se ha convertido a día de hoy en una necesidad para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, de ahí la importancia que puede tener el detectar a tiempo o valorar adecuadamente dicho estado para ponerle freno, y evitar llegar a una condición de dependencia, consecuencia en muchas ocasiones de la edad y el envejecimiento.
Este trabajo permitió a Fontecha Diezma ser uno de los dos finalistas del Premio Treelogic que promueve la empresa de I+D+i del mismo nombre, al que se presentaron medio centenar de propuestas procedentes de quince universidades españolas y argentinas.
