Daimiel Noticias.- En sesión plenaria extraordinaria, y con los únicos votos a favor del equipo de Gobierno, ha sido aprobado el Plan de Ajuste Municipal necesario para que el Gobierno central apruebe para el Ayuntamiento de Daimiel el crédito para pagar a proveedores del Consistorio. Antes de dar comienzo el pleno extraordinario, tomó posesión del cargo de concejal por el Partido Socialista, Rafael Díaz del Campo.
La sesión extraordinaria convocada para la aprobación del Plan de Ajuste Municipal necesario para acogerse a la línea ICO-Proveedores, y para la adopción de medidas para reducir gastos en materia de personal, estuvo precedida por la toma de posesión del nuevo concejal por el Partido Socialista Obrero Español, Rafael Díaz del Campo. Díaz del Campo, número 8 en la lista del PSOE en las pasadas elecciones de mayo, accede al cargo tras las renuncias anteriores de los números 3, Rosa Fernández-Espartero, el 6, Francisco Córdoba, que no llegaron a tomar posesión del acta de concejal, y la más reciente de la número 7, Ana Marchán. El Partido Socialista cuenta con cinco concejales en el Ayuntamiento de Daimiel.
Posteriormente se debatieron las dos propuestas que llevaba el equipo de Gobierno al Pleno Extraordinario. La primera de ellas relativas a las medidas para reducir gastos en materia de personal, y la segunda a la aprobación del Plan de Ajuste Municipal, un plan que es exigido por el Gobierno central para acogerse al crédito para pagar a proveedores a través del ICO. Un crédito que asciende a 1.400.000 euros.
En este sentido Izquierda Unida basó su negativa a apoyar el Plan de Ajuste a “que no hemos tenido tiempo de conocer en profundidad el Plan”, e indicaba que si “la Junta paga 900 mil euros que parece que van a llegar pronto, no haría falta pedir este crédito”. El portavoz de la coalición, Juan Julián Rodríguez de la Rubia, expresaba que todo plan “tiene unos criterios políticos y económicos, que, en este caso, son recortes, recortes y recortes”. Para IU este nuevo crédito supone que el Ayuntamiento se endeude aún más.
Cristina Maestre, portavoz del Partido Socialista, afirmaba que “estamos de acuerdo en que hay que pagar a los proveedores, pero no en la forma de hacerlo”. Coincidía con Izquierda Unida en la “rapidez con que se ha presentado el Plan”, en consonancia con “la chapuza” del Real Decreto que regula la línea ICO-Proveedores. También coincidía en la necesidad de que la Junta “pague lo que debe” mientras expresaba su “temor” en que el Plan encierra “subida de tasas, impuestos y más recortes sociales”.
Por su parte el concejal de Hacienda, David Gómez-Cambronero desmentía que con el pago de lo que adeuda la Junta (cinco millones y medio de euros), se solucionara el problema económico del Ayuntamiento, “únicamente el Ayuntamiento tendría más liquidez, pero no solucionaríamos el problema de la deuda”. Así, Gómez-Cambronero insistía en que existe un déficit entre lo presupuestado el año anterior por el Equipo de Gobierno Socialista, 20 millones de euros de gastos, y lo que se prevé recaudar, únicamente 17 millones, “generaríamos un agujero de 3 millones de euros, y este es el Plan de Ajuste que estamos realizando desde el primer momento en que llegamos al Ayuntamiento. Si no nos ajustamos, no vamos a poder pagar, porque ya no podemos endeudarnos más”.
Gómez-Cambronero indicaba que no entendía las indicaciones de que se iban a subir impuestos o hacer recortes “el plan de ajuste es aplicar el ahorro que hemos estado impulsando desde que llegamos al Equipo de Gobierno. Con todos esos ahorros, no va a haber que hacer ningún ajuste más”.
Medidas para reducir gastos en materia de personal El otro punto de debate en el orden del día eran las medidas para reducir gastos en materia de personal. La concejal de Empleo proponía al Pleno la adopción de una serie de medidas que afectan al conjunto de trabajadores del Ayuntamiento. Así se indicó que eran “medidas transitorias a aplicar hasta diciembre de 2013 por el estado excepcional en que se encuentra la situación económica del Ayuntamiento, aunque podría ser revisado en función de los resultados que vaya obteniendo el Consistorio”.
Estas medidas son, la suspensión de añadir a los días de asuntos propios aquellos días festivos que coinciden con descanso semanal o vacacional. Se suspenden también las “vacaciones no regladas”, que son días al margen de las vacaciones que se disfrutaban en Semana Santa y Navidad, o en cualquier otro momento si por razones de servicio se trabajaba en esos días. Se deja de retribuir el 100% desde el primer día que se de la circunstancia de incapacidad temporal, a no ser que haya un parte de baja. Las horas extraordinarias se “cobrarán” en días de descanso, excepto aquellos trabajos que no sean los habituales del trabajador en cuestión, que entonces sí se retribuirán de forma dineraria. Por último las ayudas del Fondo de Acción Social también se suspenden.
El objetivo de todas estas medidas, a juicio de María Dolores Martín de Almagro, es que el Ayuntamiento sea viable económicamente.
Los grupos de oposición coincidieron en afear al equipo de Gobierno que este punto se debatiera en un Pleno extraordinario, “lo que no da pie a que la gente pueda preguntar”. Coincidieron también en que se deberían haber tomado otras medidas antes de “recortar derechos a los trabajadores”. Para IU, en boca de su portavoz, Rodríguez de la Rubia, no ha habido voluntad política para negociar. Mientras que para el PSOE, no se ha contado con los representantes de los trabajadores ni con los grupos de oposición y negó la “ruina que dice el PP en la que está el Ayuntamiento”. Insistía en que con el dinero que debe la Junta, no hacía falta tomar ninguna medida. Maestre añadió que “si no se pueden subir los salarios, que al menos haya otras mejoras sociales”.
La portavoz del equipo de Gobierno negó que no se haya informado a los sindicatos ni a los trabajadores, a la vez que indicaba que se celebraba este punto en sesión extraordinaria “porque ya vamos tarde y afecta a los días de vacaciones de Semana Santa” según el anterior convenio. Martín de Almagro incidía en la situación económica de ruina del Ayuntamiento “ya que tenemos que pagar dos millones trescientos mil euros todos los años entre amortización e intereses de la deuda que dejaron los socialistas”.
En este sentido el alcalde, Leopoldo Sierra quiso cerrar el debate insistiendo en la idea de ruina económica en la que se encontraba el Ayuntamiento cuando accedieron al Gobierno municipal. Así dijo que el Ayuntamiento de Daimiel está “generando una alarma en Castilla-La Mancha por la deuda que tenemos con el Instituto de Finanzas de la Región”. Sierra desvelaba que el Ayuntamiento llegó a un acuerdo en noviembre de 2010 por valor de 6.736.000 con el Instituto de Finanzas a un interés del 0%. Sin embargo, con fecha de marzo de 2011, se solicitó el aplazamiento de la devolución de esa cantidad “a lo que contestaron que sí, pero a un interés del 6,5%”.
De este modo Sierra explicaba que la Junta debe más de cinco millones al Ayuntamiento de Daimiel, pero el Consistorio, más de seis a la Junta. El acalde reconoció que siempre “pagan los mismos las consecuencias de las crisis”, pero desde que accedió al Gobierno municipal “mi principal preocupación es poder pagar las nóminas a todos los trabajadores”.
