Por una vez la lógica de partido casa con la lógica a secas. Si era el tiempo de Emiliano García-Page al frente de los socialistas manchegos, lo normal es que evitara-como ha hecho- las reminiscencias del pesado pasado inmediato, (él no ha sido del todo ajeno a ese pesado pasado), sobre todo después de la catástrofe electoral de mayo, que fue el desembarco de Normadía para lo que vino después en noviembre. Cuando se filtró a la prensa que el nuevo secretario general buscaba una salida-presencia honrosa para José María Barreda, incluyéndolo en la ejecutiva como ex, junto a José Bono, no extrañó a casi nadie.
García-Page se encontró con el marrón de parapetar en la presidencia del partido-un cargo más honorífico que otra cosa y cuya designación nunca ha dado problemas- a José María Barreda para lo cual tenía que mover a Bono, reeditando otra vez la única eterna sucesión posible.
Para evitarlo, ambos en la Ejecutiva, como jarrones talaveranos, y problema resuelto. Una perfecta lógica de partido. Lo que ocurre es que el PSOE no está en estos momentos para lógicas de partido, ni para mantener en la presidencia carnaza tan fácil para el PP, y sí para la lógica-lógica: nuevos tiempos, nuevos dirigentes, nueva manera de hacer partido y nueva manera, tal vez, de hacer oposición ambidiestra, Page dixit-.
Siguiendo en esa lógica a secas, Page ha traslasado el cuartel de mando a Toledo, se ha rodeado de sus incondicionales y ha puesto en lugar visible a los, como él, alcaldes ganadores-excepto José Fernando Sánchez Bódalo reiterado de la alcaldía alcazareña por la suma de una coalición, que no es lo mismo que caerse con todo el equipo, más en la linea rubalcabista que la chaconista
Page ha dejado claro que el tiempo de Barreda ha pasado. Otra cosa será la manera como el moderado Page encaje la consigna de Ferraz de atajar la calle, o el estilo que impondrá a la hora de hacer oposición en las Cortes autonómicas desde fuera de las mismas, en una región en la que el clima político ha cruzado con facilidad el rubicón de las formas.
En lógica de partido tal vez hubiera encajado, el otro vencedor teórico de las elecciones de mayo y que en la actualidad preside la más visible de las aldeas galas socialistas en medio de la bandada de gaviotas: Nemesio de Lara. Pero el secretario general del PSOE provincial fue el único que amagó con una candidatura alternativa .. y ha mantenido siempre esa libre versatilidad que no encaja ni en la lírica de Barreda ni en la épica de Page .
Al final, se ha impuesto la lógica de Emiliano García-Page que a lo mejor es una síntesis de todas las lógicas, desde la evidencia de que a partir de ahora, quien manda es él con el GPS a punto («sé dónde vamos y cómo ir») -como le llama su nuevo hombre fuerte, Jesús Fernández Vaquero, utilizando las iniciales de los apellidos del secretario general Garcia Pahe Sánchez- sin jarrones que incordien al paso, ni pasto de las gabiotas.
La lógica de partido sí se evidenció con asombrosa claridad en la aprobación a la búlgara de la gestión del anterior equipo Barreda-Caballero, una gestión orgánica que es también el placet a la gestión institucional porque en el caso del PSOE en la región , lo institucional ha pesado tanto que ha fagocitado lo orgánico. En las nuevas circunstancias García Page tiene más margen de maniobra para hacer partido ante la sobrevenida viudedad institucional.
A la espera de que la vieja cultura deje paso a una nueva manera de entender el concepto de partido en el siglo XXI, lo que ya es un dato para la historia del socialismo regional es que el X Congreso del PSOE, se celebró con el partido en la oposición pero que evitó la descomposición, en una situación de profunda crisis económica e institucional, que ha alumbrado un nuevo líder para atravesar el desierto, en unos tiempos de incertidumbre y de inquietud social, que el PSOE de Page tendrá que liderar con las dos manos… o con una.
Depende de cómo interprete los tiempos el ambidiestro PageSOE-CLM.