El sindicato de Enfermería de Ciudad Real, SATSE, ha denunciado el recorte en la plantilla de matronas del paritorio del Hospital General Universitario de Ciudad Real, «en el que se ha reducido en cuatro el número de profesionales en lo que va de año».
SATSE, a través de un escrito dirigido al gerente del SESCAM, Luis Carretero, ha mostrado su «total y rotundo rechazo al despido de estas cuatro trabajadoras, puesto que de esta forma se reduce la presencia de enfermeras especialistas obstétrico ginecológicas en el paritorio a tres durante el turno de día y dos en el turno de noche, cuando hasta ahora había tres en cada turno».
SATSE considera que la reducción de la plantilla de matronas podría afectar a la asistencia que se presta a las pacientes de un servicio que al ser de urgencias debe estar siempre preparado para la atención de los partos, y cuya actividad por tanto no se puede planificar. «Durante el pasado año este servicio atendió más de 2.100 partos, por lo que si se mantiene esta tendencia podría haber problemas al contar con menos profesionales», señala.
«El recorte de cuatro matronas se produce en una plantilla como la del Hospital General de Ciudad Real que ya contaba con menos profesionales que otros hospitales del mismo nivel en Castilla-La Mancha. Mientras que el Hospital de Ciudad Real tiene 14, en el hospital de Albacete hay 23 matronas y 28 en el hospital de Toledo. La dotación también es inferior a otros hospitales que deben dar cobertura a menos población, como el hospital de Guadalajara, que cuenta con 16 matronas o el de Talavera de la Reina con 15», asegura el sindicato.
SATSE sostiene que «el despido de estas cuatro profesionales se suma al recorte de personal que se lleva produciendo en el Hospital de Ciudad Real desde comienzo de año, cuya plantilla se ha reducido en medio centenar de trabajadores de los que muchos de ellos son profesionales de enfermería, aunque desde la Gerencia del centro no se nos facilitan los datos concretos (siguiendo la línea de ocultismo en la Gerencia del centro hospitalario), y en el que, además, se han cerrado 21 camas (16 de la planta de Otorrino y 5 camas de la Unidad Infanto Juvenil)».
«A todo ello -prosige-, hay que añadir el cese de la supervisora de la Unidad (junto al de otras 14 supervisoras de Enfemería más de diversas unidades), matrona también, cuya labor garantizaba el control del material sanitario y también del personal de la unidad. Una medida con la que no sólo no se van a reducir costes, sino que a largo plazo se aumentará el gasto, puesto que no se podrá controlar el uso adecuado de material, como ya se ha demostrado en otras unidades hospitalarias».
SATSE considera que «desde el Servicio de Salud de Castilla la Mancha (SESCAM) se arremete de forma injustificada contra los profesionales de Enfermería. Para SATSE, una vez más nuestros dirigentes hacen gala de un total y profundo desconocimiento de nuestra realidad sanitaria, tomando decisiones que poco contribuyen a controlar el gasto y que lo único que generan es malestar y desconfianza entre los profesionales de Enfermería, que ven como los recortes únicamente se aplican en algunos profesionales».