Fue este sábado en la tradicional plazoleta de San Antón, pero antes tuvieron lugar las tradicionales tres vueltas a la iglesia de Santa María y la bendición de los animales.
La celebración de San Antón, patrón de los animales, se celebró este fin de semana en Daimiel. Así, el sábado a las cuatro y media de la tarde el párroco, Valentín Sánchez Rojas, procedió a la bendición de los animales y dijo que se identifican con nosotros en que “también participan de la creación del mundo”.
Acto seguido, se procedió a dar las tres vueltas a la iglesia de Santa María donde se obsequió a todos los participantes con los tradicionales «panecillos de San Antón» y «pitos». No faltaron caballos, perros, gatos y otros tantos que no se ven tan a menudo por la calle, como tortugas, conejos, canarios y hamsters. Muchos de ellos repetían experiencia y algunos otros, de menor edad, recibían por primera vez la bendición.
Al término de la eucaristía tuvo lugar el tradicional encendido de la hoguera en la Plaza de San Antón. Esta responsabilidad corrió a cargo del alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra y de Felipe López Andujar, «socio de honor» de este año. Sierra se mostraba muy satisfecho de que se siguiera con estas tradiciones y deseaba que con el fuego de San Anton “se vayan los malos augurios y empecemos a remontar el vuelo”.
Por su parte López Andújar también se sentía muy ilusionado por ser el encargado de prender el fuego pero a su vez lamentaba que no hubiera tanta gente como en años anteriores.
Acto seguido se procedió al sorteo del guarro que este año tenía como nombre «anticrisis» y cuyo premio recayó sobre el número 6.336. Los Tríduos en honor a San Antón comenzaban la tarde del sábado y continuarán el domingo y el lunes. El martes además se celebrará en la iglesia de Santa María la “Función de San Antón”.