El Colegio Público de Educación Infantil y Primaria “Enrique Tierno Galván” de Manzanares realizó el jueves por sorpresa un simulacro de emergencia en el que participaron bomberos y Policía Local. Los más de doscientos alumnos evacuaron las aulas en apenas tres minutos. Lo hicieron de forma ordenada, siguiendo las instrucciones ensayadas a lo largo de este trimestre.
El timbre del Colegio “Tierno Galván” sonaba tres veces a la una del mediodía. Era la señal de alarma de emergencia. Casi de forma inmediata, y siguiendo el protocolo, se cerraban todas las persianas de las ventanas del edificio y se abría la puerta principal del mismo. Tras sus respectivos tutores salieron los 219 alumnos y alumnas de Infantil y Primaria, que se dirigieron al punto de encuentro establecido en el campo del fútbol del centro, donde esperaron la llegada de los efectivos de seguridad y emergencia.
La Policía Local fue la primera en llegar, accediendo al interior del colegio por su puerta trasera de emergencia. Después lo hizo un camión del parque de bomberos de Manzanares. Todo el simulacro contó con el factor sorpresa, ya que ni alumnos ni profesorado sabían cuándo iba a realizarse, aunque habían estado preparándolo desde que comenzó el curso.
José Ángel Domínguez, director del “Tierno Galván”, explicó que durante octubre y noviembre, el coordinador de prevención de riesgos laborales del centro, con la colaboración del profesorado, explicó al alumnado el plan de autoprotección que tiene este colegio y cómo se tiene que hacer la evacuación, con los correspondientes ensayos.
Todo ello se puso en práctica tras oír la alarma de emergencia. Con el simulacro, el jefe de emergencia del centro anota los resultados, sobretodo el tiempo que se tarda en realizar, con el fin de enviar los datos a los servicios periféricos de Ciudad Real.
Una vez que el simulacro propiamente dicho concluyó, el centro aprovechó la presencia del servicio de emergencias y de la Policía Local para realizar un acercamiento entre el alumnado y éstos profesionales, que explicaron cuál es su labor en estos casos.
Los bomberos les mostraron las herramientas y equipos que disponen en el camión autobomba o elementos de protección del casco. Los policías, por su parte, mostraron el coche patrulla a los pequeños. Una satisfactoria recompensa por lo bien que el alumnado siguió el plan de emergencia y evacuación del colegio