Acompañado del Teniente de Alcalde de Urbanismo, Javier Navarro, el alcalde de la ciudad, Carlos Cotillas, ha informado esta mañana que ya está en pleno proceso de ejecución el Plan Asfalto 2011 que afectará a 23 calles de la ciudad. Después de todo el proceso de licitación y firma de los contratos se está reasfaltando un número importante de calles en diferentes zonas dentro del proyecto Planes Provinciales que son financiados por el Ministerio de Administraciones Públicas, la Diputación Provincial y el Ayuntamiento de la ciudad.
El proyecto supondrá una inversión de 266.000 € que permitirá el reasfaltado de las calles Orense, Santa Elia, Codo, Clavel, San Francisco, Rosario, Matadero desde San Felipe a Don Víctor, García Pavón desde Altillo a García Lorca, Santa Aurora, el parking del cementerio municipal, Campo desde plaza de España a San Luis, Huertas, Gaiferos, Dulcinea, Ángel Izquierdo, Nueva desde Manterota a Príncipe Alfonso, Zurbarán, Cervera desde la carretera de Argamasilla a Claudio Coello, Victoria y Puerto Rico. Además como mejora del proyecto se han incluido también las calles Campomanes, San Mateo, Santa Rosa, Cabo Noval, Amparo desde Don Quijote a Manterola y obras menores en otras calles de la ciudad.
Se trata por tanto de un proyecto importante que está mejorando el asfalto más deteriorado en calles céntricas y también en barrios que cuentan con un importante tránsito tanto de vehículos como personas. Al tratarse de obras de reposición, las obras no tienen repercusión económica directa para los vecinos.
Carlos Cotillas ha continuado explicando que este proyecto responde a la línea iniciada hace años de poner en marcha un plan de remodelación de calles en colaboración con otras administraciones o bien con fondos propios del Ayuntamiento para la repavimentación de calles. Este año, ha dicho el alcalde, se ha dado un buen avance y hoy día es difícil encontrar en Tomelloso una calle en mal estado.
El alcalde también ha explicado que las obras, se están ejecutando de tal modo que la nueva capa de asfalto está llegando directamente hasta el bordillo de las aceras con lo que se consigue una mejor accesibilidad sin merma alguna en la seguridad o en la evacuación de las aguas.