La Semana Santa 2011 de Manzanares será recordada porque la mayoría de los actos procesionales no pudieron llevarse a cabo debido a la lluvia, que solo dio una tregua el Domingo de Resurrección, en cuya procesión, más multitudinaria de lo habitual, participaron todas las Hermandades. El presidente de la Junta de Cofradías, Fernando Vaquero, señaló que esta atípica Semana Santa ha sido histórica e hizo referencia a la decepción de los nazarenos.
La decepción y el desconsuelo de los cofrades han sido las notas dominantes en esta atípica Semana Santa. Las previsiones meteorológicas se cumplieron y tuvieron que suspenderse todos los actos procesionales del Miércoles, Jueves y Viernes Santo.
El Vía Crucis, previsto para la noche del miércoles, se suspendió en el último momento, cuando la lluvia comenzó a caer sobre las calles de Manzanares. Se iniciaba así un periplo de tres días, en los que la lluvia no dio tregua. De este modo, el Jueves Santo, la procesión de la Pasión de Cristo no pudo llevarse a cabo y las Hermandades organizadoras lamentaban el trabajo perdido de todo un año y la decepción, que llevó a algunos incluso a perder los nervios.
Es destacable que en esta procesión, los internos de Herrera de La Mancha iban a portar, por primera vez, al Cristo de este Centro Penitenciario. El presidente de la Hermandad de la Virgen de los Dolores, con la que concurrirían a la misma, señalaba la frustración que supuso el no poder llevarla a cabo.
La madrugada continuó con la suspensión, igualmente, de la Procesión del Silencio, en la que el Patrón de Manzanares, Jesús del Perdón, no pudo recorrer las calles de la ciudad.
Los actos del Viernes Santo siguieron la tónica del día anterior, aunque un pequeño receso en las lluvias permitió que menos fieles de lo que es costumbre realizaran el tradicional peregrinaje a la ermita del Cristo de las Agonías al mediodía. Pero la procesión del Calvario de Cristo no pudo salir.
La procesión del Santo Entierro de Cristo intentó comenzar por dos ocasiones, aunque finalmente también tuvo que suspenderse. El hermano mayor destacó la decepción de los costaleros y costaleras que portan a hombros a los dos pasos, y que únicamente pudieron realizar el acto simbólico de la “levantá” dentro de la Parroquia de la Asunción.
La Semana Santa finalizó con un Domingo de Resurrección en el que, aunque con incertidumbre y nubarrones, el tiempo dio una tregua que permitió la salida de la Procesión del Resucitado. Con un multitudinario acompañamiento, contó con la participación de todas las Hermandades de Manzanares.
El presidente de la Junta de Cofradías, Fernando Vaquero, lamentó la suspensión de la mayor parte de las procesiones y resaltó el esfuerzo y el trabajo que durante todo el año realizan las hermandades.
Por su parte, el concejal de Cultura, Antonio Caba, incidió en la decepción de los hermanos y costaleros, y se lamentó por las repercusiones que el mal tiempo pudo tener sobre el turismo en la localidad.