Vicente Luchena Rodríguez, representante de Ecologistas en Acción-Valle de Alcudia, ha denunciado que este colectivo no ha sido consultado para la redacción del proyecto de Ley que convertirá a la zona en Parque Natural. Es más, considera que, tal y como está redactado el documento, el paraje «será entregado en brazos de la industria cinegética sin regulación específica».
Por su interés, reproducimos íntegro el comunicado remitido por Vicente Luchena, representante de Ecologistas en Acción-Valle de Alcudia:
Ante el inicio del trámite parlamentario regional para la definitiva aprobación del Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona, Ecologistas en Acción-Valle de Alcudia insta a los parlamentarios a que rechacen el actual proyecto de Ley.
Hace más de veinte años Ecologistas en Acción-Valle de Alcudia fue el colectivo pionero en la divulgación de los valores naturales y culturales del Valle de Alcudia y Sierra Madrona. Han sido numerosísimas las actividades de estudio y divulgación que hemos desarrollado en torno a nuestra comarca. Fruto del conocimiento directo de la realidad de esta tierra llegamos, hace más de dos décadas, al convencimiento de que era necesario protegerla, ya que eran también numerosas, y lo siguen siendo, las agresiones que menoscaban esta riqueza ambiental y cultural.
La idea de que el Valle de Alcudia y Sierra Madrona debía ser, al menos, Parque Natural fue de este colectivo; colectivo que impulsó con rigor y notable esfuerzo la declaración de esta zona como espacio natural protegido. Al principio chocamos con la indiferencia –cuando no el rechazo frontal- de las instituciones regionales y locales, esas mismas que ahora parecen que han “descubierto la pólvora”. No con el paso del tiempo, sino de numerosas actividades de estudio, sensibilización y protección, el proyecto de esta asociación, con la ayuda de muchas otras personas ha conseguido por fin que el Gobierno Regional se dé cuenta de que tiene la obligación de proteger este espacio.
Sin embargo, a día de hoy, y después de varios años de “trámites legales” y cuando ya se entrega al Parlamento Regional el documento definitivo para su aprobación, este colectivo no ha sido requerido EN NINGUNA OCASIÓN para ser consultado ni ofrecerle ninguna información sobre el proyecto para la protección de la comarca. Cuando algunos responsables políticos hablan de que nos han dado participación, sencilla y llanamente están faltando a la verdad.
Además de esto, ya de por sí bastante grave, desde Ecologistas en Acción-Valle de Alcudia denunciamos la parcialidad del Gobierno Regional al haber redactado un documento que se “entrega en brazos de la industria cinegética” a la que prácticamente no establece ninguna regulación específica por tratarse de un futuro parque natural y, en cambio, dificulta notablemente la realización de actividades mucho más inocuas para el entorno como el senderismo o el cicloturismo.
Al día de hoy, las agresiones más graves que sufre la comarca son las relacionadas con la industria cinegética y la gestión de las áreas forestales, tanto en las fincas privadas como en las públicas. Cualquier persona que “salga” por esta tierra desde hace unos años habrá podido comprobar la degradación progresiva y evidente que sufren nuestros montes: apertura indiscriminada de carriles para llevar a los cazadores en sus coches hasta lugares recónditos de las sierras; apertura incontrolada de “cortafuegos”, realmente disparaderos para las monterías; instalación de vallados, ilegales en la mayoría de los casos; tala de miles de robles para “clarear” los bosques; cierre de caminos públicos; etc., etc., etc.
Tampoco hay que olvidar que el proyecto para la protección de la comarca deja fuera de sus límites a más de una tercera parte del Valle de Alcudia; algo incomprensible desde el punto de vista técnico, biológico, paisajístico, cultural o histórico.
Todo esto nos lleva a instar a los parlamentarios de Castilla-La Mancha a que rechacen el proyecto de Ley que ha presentado el Gobierno Regional; un gobierno que cede ante los terratenientes y ante oscuros intereses. Consecuentemente, pedimos al Parlamento Regional y a su gobierno a que se inicie “como es debido” un proyecto de protección con la participación de TODAS las partes implicadas, con transparencia, con objetivos claros, con rigor técnico y sin actitudes sectarias.