Muy breve. Zapatero llamó a Gómez para que amansara Madrid y se preparara para combatir con Aguirre. Luego convencieron a Zapatero (dicen los mejor informados que Blanco y la santa compaña) para que la duelista fuera Jiménez que vestía mejor en las encuestas internas (??).
Entonces Zapatero convoca a Gómez para decirle que se eche a un lado y haga paso que viene la Trini pero Gómez le dice a Zapa a media voz o a voz entera que si quiere que se eche a un lado mejor que lo echen los militantes de carné y cuota que los caprichos maquiavélicos de cuatro rasputines. El PSOE contempla en sus estatutos la celebración de primarias cuando hay más de un candidato, es verdad. Pero el aparato siempre trata de «persuadir» a los candidatos, porque no hay una cultura natural de primarias en los partidos españoles. Gómez fue quien obligó a primarias al negarse a retirarse mansamente para dejar paso a la Trini y no como dicen (están obligadas a ello) la Trini y la señá De la Vega, porque el PSOE es la leche en cuestión de democracia interna y el PP el café, de tan negro proceder como el designazo. Quien esté libre del /designio /que tire el primer voto. Es incomprensible la abundancia de dirigentes que aún se cree que el electorado es idiota.
